El Gobierno y el PSE acusan al PNV de 'pervertir la democracia' y 'legitimar a ETA'

El Gobierno y los socialistas coincidieron ayer en sus duras reacciones contra las declaraciones de los líderes del PNV con motivo del Aberri Eguna (Día de la Patria Vasca). El ministro de Justicia, Ángel Acebes, acusó al lehendakari, Juan José Ibarretxe, de 'pervertir la democracia' y protagonizar una 'mentira obscena' por considerar que la ilegalización de Batasuna 'da oxígeno a ETA'. El secretario general del Partido Socialista de Euskadi, Patxi López, tildó de 'insulto a la inteligencia' el anuncio del presidente del PNV, Xabier Arzalluz, de que pedirá a ETA que rectifique su 'forma de hacer política'.

El ministro de Justicia convocó de urgencia una conferencia de prensa para contestar a los nacionalistas vascos. Acebes interpretó que el PNV ya no cuestiona la constitucionalidad del proyecto de Ley de Partidos Políticos, cuyo objetivo declarado es la ilegalización de Batasuna, sino sus consecuencias políticas. 'Sería una perversión de la democracia que por unas consecuencias políticas haya que admitir que sea legal y se financie con fondos públicos un partido que coadyuva al terror y viola los derechos más esenciales', señaló Acebes. El ministro censuró las declaraciones de Ibarretxe sobre la posibilidad de que la ilegalización de Batasuna dé oxígeno a ETA: 'Es una mentira obscena. Son las víctimas del terrorismo las que necesitan oxígeno', remachó el ministro. Tras insistir en que la ley de partidos 'no ilegaliza ideas sino comportamientos' negó que la decisión de la ilegalización sea 'administrativa, pues recaerá sobre el Tribunal Supremo'.

Acebes, tras anunciar una inminente ronda con los partidos con representación parlamentaria para 'mejorar' el anteproyecto, propuso que la iniciativa de la ilegalización de Batasuna, una vez que la ley de partidos se apruebe en otoño, no se limite al Gobierno sino que sea conjunta y participen también los grupos parlamentarios del Congreso y del Senado. El anteproyecto de ley permite que sea cualquiera de estas instituciones las que promuevan la iniciativa y en el caso de los grupos parlamentarios basta con que la suscriban 50 diputados o 50 senadores.

Con la iniciativa conjunta se refuerza la legitimidad democrática de la ilegalización, señaló el ministro, que recordó que en la última iniciativa de ilegalización de un partido en Alemania participaron, además del Gobierno, el Congreso, el Senado y el Ministerio Fiscal.

'Desprecio sangrante'

Por su parte, el secretario general del Partido Socialista de Euskadi, Patxi López, cumplió su compromiso, cuestionado por el PP y anunciado tras su elección en el Congreso de su partido el pasado 23 de marzo, de ser exigente con las posiciones nacionalistas complacientes con ETA. López se revolvió ayer contra Arzalluz por sus declaraciones con motivo del Aberri Eguna al acusarle de mostrar un 'desprecio sangrante' a la memoria de las víctimas del terrorismo y a los partidos democráticos que 'se están jugando la vida por defender las libertades'. López critica así las declaraciones de Arzalluz anunciando que que iba a pedir a ETA que rectificara su forma de 'hacer política'. López aclaró que si el nacionalismo insiste en 'legitimar a ETA concediéndole la condición de ser una fuerza política equiparable a las demás' se encontrará con la 'oposición frontal de los socialistas'. López consideró 'absolutamente impresentable en una democracia meter en el mismo saco', como hizo Arzalluz, 'al terrorismo de ETA con el Gobierno del PP'.