Concluye la campaña de invierno de albergues para indigentes

Las elevadas temperaturas de los últimos días han llevado al Ayuntamiento de Madrid a dar por finalizado el plan contra el frío iniciado en noviembre para ofrecer alojamientos de emergencia a las personas sin hogar.

Ayer cerraron, hasta el próximo invierno, las 75 camas (45 para hombres y 30 para mujeres) de los pabellones 1 y 2 del albergue de Mayorales, en la Casa de Campo, y el pasado domingo echó la persiana el refugio del Don de María, con 80 plazas regentadas por la asociación Casa de los Pobres en un local municipal del parque del Emir Mohamed I (Centro).

También se cerró hace un mes el precario cobijo nocturno que cada año es habilitado en un pasillo de la estación de metro de Atocha para los indigentes reacios a acudir a los albergues. Este refugio sólo funciona cuando los termómetros bajan de cero grados.

El resto de los albergues abre todo el año. Son el Centro de Acogida de San Isidro, con 269 plazas; el pabellón 3 de Mayorales, con 80 plazas de baja exigencia, y las 555 camas de los refugios dirigidos por entidades religiosas. Tampoco cierran, salvo para reformas, los dos cobijos para inmigrantes regentados por Cruz Roja en San Blas (172 camas) y la Casa de Campo (60).