Marcos Ordóñez novela en 'Comedia con fantasmas' 50 años de teatro

'Es una novela de amor, a los cómicos y al teatro, mis dos pasiones', afirmó el escritor y periodista Marcos Ordóñez (Barcelona, 1957) en la presentación de su última obra, Comedia con fantasmas (Plaza & Janés), celebrada el lunes en el antiguo teatro Beatriz (hoy restaurante Teatriz), de Madrid. A su lado, testigos y memoria viva del medio siglo que refleja su novela, los actores Manuel Alexandre y José Sazatornil, que el autor prefirió llamar sir Saza y sir Alexandre.

Profesor de guión en la Universidad Pompeu Fabra, de teatro contemporáneo y crítica teatral en el Institut del Teatre y colaborador de Babelia, Marcos Ordóñez ha publicado una docena de títulos, entre los que destacan Una vuelta por el Rialto, Rancho aparte, Puerto Ángel y Tarzán en Acapulco.

En la novela Comedia con fantasmas, el autor quiere rendir homenaje a la escena y a los cómicos, con historias reales y peripecias ficticias a partir de la vida y obra de Enrique Rambal, cuyos espectáculos, admirados por Orson Welles, llenaron los teatros de los años veinte y treinta, con giras por Hispanoamérica, y que murió en la miseria.

Marcos Ordóñez sigue la 'magia teatral' de Rambal en sus personajes, a través de un Madrid que ya no existe y el Paralelo barcelonés de los años treinta, el paso al cine y la llegada de la televisión. Los recuerdos familiares del autor, con vinculaciones a profesiones teatrales, influyen también en la narración, que alcanza las 489 páginas.

Una afonía impidió al actor José María Pou presentar el libro, cuyo nombre figura en la dedicatoria, aunque envió una cinta para decir que Marcos Ordóñez, 'amigo y hermano', es 'el mejor crítico de teatro'. 'Es la gran novela del teatro en España, sobre la pasión de los cómicos, sus baúles, pensiones, fracasos y grandezas'.

Añadió que la novela es la crónica de una época y unas gentes del teatro, en unos escenarios que han desaparecido o son inventados, que en el cine tiene los precedentes de Cómicos, de Bardem, y El viaje a ninguna parte, de Fernán-Gómez.