El Gobierno vasco abrirá una delegación en México y estudia otra en Madrid
El Gobierno vasco aprobó ayer en consejo la apertura de una delegación en México. Será la segunda que el Ejecutivo autónomo tenga en el extrajero, después de la Bruselas. Ésta se inauguró en 1996, después de que una sentencia del Tribunal Constitucional diera la razón a la Administración de Vitoria, que se vio obligado a suspender durante ocho años su instalación, formalmente decidida en 1988, por el recurso del Gobierno central ante el alto tribunal.
El portavoz del Gobierno vasco, Josu Jon Imaz, explicó que la decisión de ayer se enmarca en el acuerdo de coalición para la formación de gobierno que incluye la consecución de una serie de objetivos en materia exterior, entre los que figura el de 'potenciar el impacto político y económico de Euskadi' en el extranjero. Así, Imaz avanzó que durante este mandato el Gobierno estudiará la apertura de otras delegaciones. Los siguientes objetivos del Ejecutivo vasco son Argentina, Venezuela y Chile, donde también hay importantes colonias vascas y empresas vascas con intereses. Imaz admitió que su Gobierno estudia también la conveniencia de instalar una sede en Madrid, con la que ya cuentan otras comunidades, como Cataluña o Galicia. Hasta ahora, el Gobierno vasco carece de un lugar de referencia en la capital.
La elección de México como primera experiencia tras la de Bruselas responde al 'volumen y entidad' de las relaciones, sobre todo entre agentes económicos, ya existentes. La delegación dependerá de la Secretaría General de Acción Exterior, inserta a su vez en la estructura de la Presidencia del Gobierno vasco.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.