La pobreza en los hogares encabezados por mujeres es cuatro veces mayor

La incidencia de la pobreza en Euskadi es casi cuatro veces mayor en hogares encabezados por una mujer que por un hombre. Así, la pobreza afecta al 15% de los hogares encabezados por mujeres, frente al 4,2% de los que están a cargo de los hombres, según la Encuesta de Pobreza y Desigualdades Sociales del Departamento de Justicia, Trabajo y Seguridad Social del año 2000.

El estudio refleja, asimismo, que la tasa de pobreza de mantenimiento femenina ha aumentado del 9,8% de 1996 al 13,3% del año 2000, cuando en el caso del colectivo masculino se viene continuamente reduciendo.

El colectivo en situación más precaria es el de las mujeres desempleadas, grupo en el que casi un 60% de las personas consideradas se encuentra afectado por uno u otro tipo de pobreza, frente a un 29% entre el colectivo masculino de desempleados. Otro colectivo sujeto a una tasa de pobreza muy elevada es el de las mujeres inactivas menores de 65 años, con una tasa de incidencia de una u otra forma de pobreza del 18,4%, pero también es una situación que se produce de forma importante, por encima de la media vasca, en el de activas e incluso ocupadas (mujeres no casadas, solas o en familias monoparentales) en las ramas de hostelería y del servicio doméstico, asociado a un alto nivel de precariedad laboral.

Así, el informe refleja que uno de los colectivos más afectados por la pobreza de mantenimiento, y donde se producen aumentos en los niveles relativos de este tipo de carencia, es en el grupo de mujeres inactivos independientemente de su edad, aunque esto se da principalmente en mujeres solas con prestaciones no contributivas fundamentalmente mayores de 65 años -con pensiones de viudedad u otras prestaciones contributivas o no-.