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Profesionales de salud mental se oponen al parque de ocio en Bétera

La Diputación proyecta un recinto temático en el psiquiátrico

Un total de 432 trabajadores de servicios sociales de la Diputación de Valencia denuncian en un escrito el 'desprecio' que supone situar un parque de ocio en el actual emplazamiento del hospital psiquiátrico de Bétera -en el que hay 140 enfermos-, critican el Plan de Salud Mental recientemente elaborado por la Generalitat y lamentan el 'fomento de la privatización y la precariedad' de los servicios públicos.

El escrito responde al anuncio realizado por el presidente de la Diputación de Valencia, Fernando Giner, de situar en el recinto del hospital psiquiátrico el Parc dels Pobles, un centro de ocio de unos 500.000 metros cuadrados donde se pretende reflejar la cultura tradicional de la provincia. Este proyecto, que no fue comunicado a los trabajadores y los residentes del hospital, fue presentado en la pasada edición de la Feria Internacional del Turismo de Madrid, Fitur, por el propio Giner. En el centro hay unos 140 enfermos, 80 de ellos en un módulo específico de enfermos mentales y otros 60 enfermos mentales crónicos, además de unos 180 trabajadores (7 médicos, 12 enfermeros, 60 auxiliares, 10 monitores, 15 administrativos, 15 limpiadoras, entre ellos).

En un escrito dirigido al máximo responsable de la entidad provincial, los 432 trabajadores alertan sobre las 'grandes repercusiones' que el proyecto supondría tanto para los internos como para los profesionales del centro por lo que solicitan que se tengan 'en cuenta' sus reivindicaciones.

Los trabajadores exponen en el documento que la decisión tomada muestra que el poder político 'desprecia' el contenido del centro público asistencial 'decidiendo sin consultar a ninguno de los colectivos afectados la reconversión en algo ajeno a su cometido asistencial original'. Los profesionales aprovechan la nota para describir la 'difícil' situación por la que atraviesa la atención a la enfermedad mental en la Comunidad. Señalan que la Generalitat, a través de las consejerías de Sanidad y de Bienestar Social, hizo público un ambicioso Plan de Salud Mental, que contemplaba crear seis nuevos hospitales de día de salud mental, implantar nuevas unidades tanto para niños y adolescentes, como para pacientes adultos y aumentar los ratios de psiquiatras por cada 100.000 habitantes hasta nueve especialistas. El programa, que está previsto que concluya en el año 2004, fue anunciado con una inversión prevista de 6.500 millones de pesetas.

El medio centenar de trabajadores critica que mientras la Administración autonómica es la que presenta estos planes ambiciosos, 'sigue siendo la Diputación' -que tiene gran parte de los recursos en salud mental de la Comunidad Valenciana- la que toma 'las decisiones de más trascendencia', como es la propuesta actual, que pone en peligro el futuro de las actuales dependencias de Bétera. A ello añaden que, por un lado, se anuncian planes millonarios, y por otro, 'se cierran' los centros de rehabilitación e inserción social de enfermos, y faltan camas y recursos intermedios como hospitales de día o unidades de media estancia. 'Frente a las cifras multimillonarias que propone la Generalitat con el Plan de Salud Mental hay una pérdida de calidad asistencial debido a que no se dota de personal suficiente los centros', apuntan. Los especialistas destacan que no hay suficientes fondos destinados a rehabilitación y que 'se carece' de instalaciones adecuadas en los centros'. Además, censuran el hecho de que 'se confunde la participación voluntaria de las familias, despreciando sus valiosos esfuerzos, para dar pie a potenciar la privatización y a la precariedad de los servicios públicos'.

Ante 'esta incongruencia es de esperar un deterioro de nuestra labor asistencial que cuenta más con el entusiasmo de los profesionales que con el apoyo real de la institución', afirman los firmantes. Por ello, solicitan coherencia asistencial, consenso con los pacientes y trabajadores ante cualquier nuevo proyecto, protección del patrimonio público frente a medidas privatizadores y el respeto a los derechos de los enfermos, entre otros.

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