Ford España confía en mejorar los resultados de 2000 y destaca el aumento de ventas en el mercado interior

El consejero delegado de Ford España, José Manuel Machado, aseguró ayer en Ginebra que la firma prevé obtener 'una sensible mejora de sus resultados económicos' de 2001. Machado, en cualquier caso, precisó que 'aún es pronto para saber' si la filial española de la multinacional automovilística registrará pérdidas o ganancias en la cuenta de resultados del año pasado.

José Manuel Machado realizó estas declaraciones durante la primera jornada del salón del Automóvil de Ginebra. El consejero delegado de Ford España explicó que el año pasado la firma aumentó un 12% sus ventas en el mercado español, dos puntos por encima de la previsión inicial. La facturación por ventas de la filial española, asimismo, también creció por encima de ese porcentaje.

La cuenta de resultados de Ford España del año 2000 arrojó unas pérdidas de 65,6 millones de euros (10.929 millones de pesetas). Un resultado que se explicó, entre otras razones, en el descenso del 4,2% en las ventas de vehículos y en el incremento del gasto de amortización y del destinado a personal. Las pérdidas, en cualquier caso, se produjeron en un año récord en cifras de producción. La factoría de Ford en Almussafes fabricó 343.794 vehículos en 2000.

El año pasado, la planta valenciana de Ford registró un descenso del 7,38% en la fabricación de coches y del 25% en la de motores. En el resultado de esta última cifra fue determinante el fin de la producción del motor Zetec-SE, en marzo de 2001. En conjunto, las cifras de producción de Ford Almussafes estuvieron condicionadas por el descenso en la demanda exterior, que cayeron un 11%. La planta valenciana exporta el 80,2% de su producción de vehículos.

El salón del Automóvil de Ginebra también contó ayer con la presencia del presidente de Ford Motor Company, William Ford, y del responsable europeo de la empresa, David Thursfield, quien destacó que la compañía consiguió el año pasado obtener beneficios, tras las pérdidas registradas en 2000. Thursfield, en cualquier caso, no quiso cuantificar los beneficios obtenidos, aunque reconoció la modestia de los números.