'Fidalgo ha abierto una quiebra'

Rodolfo Benito (Madrid, 1957) responsabiliza al líder de CC OO, José María Fidalgo, de la crisis que ha estallado en el sindicato. Quien hasta el lunes era el número dos de la central asegura que el conflicto ha generado una quiebra que debilita a la dirección en sus relaciones con el Gobierno y la patronal.

Pregunta. ¿Conoce ya las razones de su destitución?

Respuesta. No hay argumentos de peso del secretario general para proponer mi salida, sino para que se produjeran tres dimisiones por la quiebra que en la dirección ha realizado Fidalgo.

P. ¿Ha manifestado usted discrepancias sindicales?

R. He planteado que el Gobierno tiene la iniciativa en el diálogo social, y pretende quebrar un modelo de diálogo cuando dice que, si en una fecha no hay acuerdo, legisla. Hice esa reflexión pensando de cara a un futuro complicado, con un proceso de desaceleración económica; cuando el área económica del Gobierno sigue con la idea de poner encima de la mesa una reforma de la negociación colectiva.

P. ¿Se ha derechizado CC OO?

R. Comisiones tiene una política sindical muy definida, que intenta gobernar la acción sindical desde el acuerdo sin renunciar al conflicto. Cualquier giro que tenga que dar CC OO siempre tiene que ser un giro a la realidad.

P. Fidalgo ha comentado que usted ha estado sentando las bases para presentarse en el VIII Congreso, de 2004, a secretario general.

R. Las únicas bases que he sentado han sido para apoyar a Fidalgo como secretario general. Hablar del VIII Congreso hoy es un disparate.

P. ¿Su destitución cierra la crisis en el sindicato?

R. Abre una quiebra, en la dirección y también en la organización, en la medida en que no existía una crisis que había que cerrar, sino que el secretario general lo que hace es abrir una quiebra con una propuesta de cese de mis responsabilidades en el secretariado. Y, además, la hace después de una reunión del comité donde la mayoría de las organizaciones le manifiestan la inconveniencia de abrir esta crisis en CC OO.

P. El sindicato se ha quebrado y ha surgido una nueva vía.

R. No hay nueva vía. Lo que se da es una quiebra en la mayoría que ha dirigido esta confederación en los últimos años. Eso debilita a la dirección, y que esté debilitada es malo en nuestra relación con los afiliados, con los trabajadores, con el Gobierno y con la patronal.