Más críticas para la Mutua

Con esta carta pretendo hacer extensiva la crítica hacia la Mutua Madrileña Automovilista realizada por José Martínez de la Loma-Noriega, el pasado 9 de febrero de 2002, en estas páginas.

Mi caso es el siguiente: en julio de 2001 tuve un accidente con una ambulancia del Samur, debido a una negligencia cometida por su parte (al estar adelantando en dirección contraria sin nigun tipo de señalización, como luces o sirena). En las conversaciones telefónicas que mantuve con posterioridad con el propio Samur, me confirmaron que ellos se harían cargo de todos los gastos al reconocer su culpa.

Pero cuál es mi sorpresa cuando, en enero de 2002, recibo una carta certificada de la Mutua señalando que había excedido el cupo de accidentes, y que, por lo tanto, las bonificaciones que tenía eran anuladas y tenía que volver a pagar la prima íntegra.

Cuando me acerco a ver cuál es el motivo de dicho incremento y penalización, descubro que los gastos de aquel accidente tenido en julio de 2001 habían sido asumidos por mi compañía. Las razones aludidas por la Mutua para dicha asunción de la deuda eran la incompatibilidad de versiones por cada una de las partes del conflicto y la existencia de un convenio entre aseguradoras.

En este punto, yo me pregunto: ¿la Mutua Madrileña no debe defender mis intereses?, ¿no tienen la obligación de comprobar cuál fue el hecho ocurrido y en, caso de duda, acudir a las partes afectadas?, ¿tendrá algo que ver que la parte contraria sea un servicio público para que no se haya realizado ninguna de estas comprobaciones?

A pesar de pagar todos los años nuestras cuotas para estar defendidos y cubiertos en caso de conflictos, estamos verdaderamente indefensos en derechos e intereses.