Mejorando Mollet

El portavoz de Esquerra Unida i Alternativa (EUiA) en Mollet del Vallès expresaba en una carta publicada el pasado 6 de febrero en este diario un conjunto de afirmaciones inciertas que, como miembro del equipo de gobierno municipal de Mollet, me veo obligado a rebatir.

Las modificaciones del plan general aprobadas por el pleno del Ayuntamiento de Mollet despliegan y adaptan a la realidad actual de la ciudad el contenido de éste, que data de 1981. Hablar de desarrollismo cuando Mollet, con un término municipal muy reducido, ha optado por mantener como no urbanizable, agrícola y forestal más de la mitad de su suelo, dotándolo de un plan especial de protección al que EUiA se opuso, es bastante descabellado.

En las zonas nuevas, objeto de modificación del planeamiento, como en la zona del Calderí, se ha logrado reducir sustancialmente el numero de viviendas programado en 1981. En la de la Vinyota, se dispondrá de más del 85% del espacio destinado a equipamientos y espacios públicos, y todas y cada una de las viviendas que allá se harán serán de protección oficial. En la zona de Can Fàbregas se reconvierte un espacio interno del casco urbano, hasta ahora ocupado por actividad industrial, en una zona con parque central, dos nuevas plazas públicas, viviendas, servicios y equipamientos, como la nueva guardería municipal y los nuevos talleres ocupacionales.

En la última sesión plenaria, se aprobó la creación de una bolsa de viviendas de alquiler, para facilitar el acceso a ésta de los sectores menos favorecidos, a la que EUiA también votó en contra.

Por último, Mollet pondrá en marcha un proceso participativo de revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) el próximo trimestre y a finales de este año tendrá un nuevo servicio, el de transporte urbano interno, porque el gobierno municipal (PSC, IC-V) cree que es necesario y positivo para la ciudad, aunque no se tenga la obligación de crearlo por no tener 50.000 habitantes.

La legítima expresión de la opinión crítica merece ser compatible con el rigor y con el respeto a la verdad, porque cuando se manipula ésta y se pretende engañar a la gente como hace EUiA de Mollet, se hace un flaco favor a la ciudadanía que uno sirve y otro aún peor, a uno mismo.-Jesús M. Carrasco. Portavoz de Iniciativa per Catalunya-Verds de Mollet y concejal de Ciudad Educadora y Consumo. Mollet del Vallès.

Después de leer con atención la carta publicada el pasado 6 de febrero por el dirigente de Esquerra Unida i Alternativa de Mollet del Vallès, Antonio López, en este diario, uno no sabe si vivimos en la misma ciudad y pertenecemos a la misma corporación municipal, o es que, sin saberlo, vivo en Las Vegas; o a lo mejor donde le gustaría vivir al señor López es en la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas de la época de Stalin, donde toda la planificación, gestión y ejecución eran públicas. Lo que está claro que es que un servidor vive en Mollet del Vallès, ciudad de la Unión Europea, y que, por lo tanto, se encuentra dentro de una economía de mercado.

Respecto a los tres proyectos que se citan en la carta (la Vinyota, Sedunión y Calderí), son tres proyectos de modificación del planeamiento, aún en tramitación, que se caracterizan por concentrar en el 30% del suelo los aprovechamientos privados y liberar para usos públicos (viales, zonas verdes y equipamientos) el restante 70%. Además las reservas de equipamientos están pensadas mayoritariamente para satisfacer necesidades del conjunto de la ciudad y no en el ámbito de barrio. También hay que destacar que una de las propuestas (la Vinyota) está proyectada para que la totalidad del suelo sea gestionada por la empresa pública de promoción del suelo y las 350 viviendas previstas han de salir al mercado bajo algún tipo de protección.

También quisiera destacar que esta misma primavera se presentará públicamente el avance de planeamiento y al mismo tiempo se hará una exposición y un conjunto de presentaciones a los diferentes sectores de la sociedad que permitan presentar y debatir las propuestas urbanísticas del equipo de gobierno para los próximos 20 años.

El gobierno socialista de Mollet del Vallès trabaja desde hace muchos años por un modelo de ciudad que sea un ejemplo de planificación, tal como lo demuestra que su plan fue Premio Nacional de Urbanismo o que el espacio público surgido de unos de sus planes especiales ejecutados ha sido galardonado como mejor espacio público europeo y, al mismo tiempo, un ejemplo de ciudad compacta que libera el 45% de su término municipal de los procesos de urbanización y lucha para que este espacio (Gallecs) se convierta en un parque rural.

Creo que un representante democrático de la ciudad tendría que informarse y documentarse mejor antes de emitir sus necesarias opiniones y no dedicarse a difundir infundadas calumnias que lo único que consiguen son degradar el noble arte de la política y de la confrontación de ideas.