Álvarez propone ayudas fiscales por contratar empleados domésticos para acabar con la economía sumergida

El sindicato UGT propondrá medidas de ayuda a las familias durante el congreso que celebrará en Tarragona entre los próximos días 19 y 22 de marzo. Entre las medidas que propone UGT para aplicar en el marco de un pacto social para los derechos de las familias destacan reducciones fiscales y ayudas para conciliar el trabajo y la vida cotidiana. El sindicato que encabeza Josep Maria Álvarez pide que se reduzcan los ingresos que se declaran en el IRPF cuando la familia tiene contratadas personas para la limpieza de la casa, o para la educación y la atención de los niños menores de seis años.

UGT quiere acabar con la economía sumergida dentro del sector de trabajo doméstico. Álvarez sostiene que la falta de incentivos fiscales 'incita a la clandestinidad y favorece la economía sumergida'. Álvarez dice que el congreso del sindicato se centrará en debatir sobre los derechos de las familias porque España 'es el tercer país por la cola de la Unión Europea en inversiones en políticas familiares', sólo por delante de Grecia y Portugal.

Álvarez pone como ejemplo que en Alemania se invierten unos 1.803 euros (300.000 pesetas) anuales por familia, mientras que en España son 300,5 euros (50.000 pesetas anuales) la cantidad que se invierte en políticas sociales por cada familia.

UGT defiende además que 'una baja por maternidad no puede ser elemento discriminatorio para la promoción profesional de la mujer' y quiere lograr que se garantice la vuelta de la mujer a su puesto de trabajo tras tener un hijo. UGT de Cataluña también reclama que las mujeres paradas cobren la baja por maternidad tal como hacen las mujeres que trabajan, ya que durante las 16 semanas de baja establecidas 'las trabajadoras ya no tienen relación con las empresas y es la Seguridad Social la que paga su salario, por lo que debería hacerlo también con las desempleadas', afirma el líder ugetista.

El sindicato reclamará a la Generalitat que el Tribunal Laboral de Cataluña cree una Agencia de Mediación para la Conciliación de la Vida Laboral y Familiar, con el objetivo de intervenir en la negociación entre el empleado y la empresa en el caso de conflictos, y evitar así que el caso pase a la magistratura.