Un logotipo de Mariscal identifica el nuevo eje de L'Hospitalet

La entrada y salida a Barcelona a través de la Gran Via constituía hasta hace pocos años un paisaje tercermundista, donde alternaban los cementerios de coches y neumáticos con construcciones abandonadas; una tierra de nadie de escaso interés que ahora se convertirá en una de las principales zonas económicas de Cataluña. Medio centenar de iniciativas de carácter comercial y de servicios, algunas ya en funcionamiento y otras previstas en la fachada de la Gran Via -en las áreas de Pedrosa y Gran Via Sud- conforman el nuevo distrito económico bautizado como Granvia L'Hospitalet con un logotipo que la identifica diseñado por Xavier Mariscal.

El pleno municipal dio ayer el visto bueno a la nueva división territorial de la ciudad y a la creación del que será el séptimo distrito de L'Hospitalet, emplazado a medio camino entre la ciudad de Barcelona y el aeropuerto de El Prat, en el que antes de 2010 se habrán instalado equipamientos metropolitanos de tanta importancia como la Ciudad Judicial, la City Metropolitana, el Centro Comercial Granvia 2, Ikea, el recinto ferial Montjuïc-2 L'Hospitalet y un hotel de lujo proyectado por el arquitecto Richard Rogers.

Estas actividades supondrán una inversión de 500 millones de euros y la creación de más de 20.000 nuevos puestos de trabajo, los que se corresponden con el medio millón de metros cuadrados edificables previstos en la zona.

El potencial económico de esta zona ha obligado también a una transformación urbanística de su eje central, la Gran Via, que se ha de convertir en una vía más urbana e integrada en la ciudad que facilite los accesos a las nuevas actividades. La transformación será impulsada por el consorcio creado esta misma semana por el Departamento de Política Territorial de la Generalitat y el Ayuntamiento de L'Hospitalet, y supondrá una inversión inicial de 60 millones de euros que se financiarán a través de las plusvalias que generará el propio sector.

El objetivo, explica el alcalde de la ciudad, Celestino Corbacho, es 'dotar de personalidad y definir un territorio de dos millones de metros cuadrados que corría el peligro de convertirse en tierra de nadie'.

Al impulso e identificación del nuevo distrito de L'Hospitalet ayudará su nueva imagen corporativa, diseñada por Xavier Mariscal a través de un encargo del propio Ayuntamiento. Mariscal ha propuesto un logotipo con el nombre del distrito en el que mezcla tipografía de caja alta y caja baja (mayúsculas y minúsculas) para reflejar la diversidad de formas de los edificios previstos, así como de las actividades económicas que el nuevo distrito plantea: comercial, financiera, servicios y equipamientos. El logotipo será utilizado en los distintivos y la publicidad de las mismas empresas que se instalen en el distrito, así como en el mobiliario urbano y la señalización.

El alcalde, Celestino Corbacho, cree que con el desarrollo de todas las actividades económicas previstas en la zona, el nuevo distrito de L'Hospitalet 'se convertirá en uno de los más potentes del área metropolitana de Barcelona', en una situación privilegiada donde se potenciará el transporte público con la llegada de la futura línea 9 del metro y una nueva parada de Ferrocarrils de la Generalitat.