La conflictiva relación de puestos de trabajo

Eduardo Zaplana se descolgó hace diez meses en Alicante con un sorprendente compromiso para poner fin a la precariedad laboral en el seno de la Administración de la Generalitat Valenciana. Carlos González Cepeda, responsable de Administración Pública, fue designado para acometer tal misión. González Cepeda intentó enfriar la patata que le trasladó el presidente a través de reuniones con responsables sindicales y mediante la implicación en el asunto de los responsables de Sanidad y Educación, dos áreas en las que los empleados con carácter interino se cuentan por miles.

Las promesas de sucesivas convocatorias de ofertas de empleo público para poner coto al problema, la única vía posible, cobraron cuerpo. Pero tropezaban con un requisito formal. Antes de dotar plazas vacantes al servicio de la Administración autonómica es imprescindible establecer la denominada 'Relación de Puestos de Trabajo' (RPT) al servicio de la Generalitat.

El Diario Oficial de la Generalitat Valenciana del pasado viernes recoge, finalmente, la RPT. Pero fuentes sindicales se han apresurado a anunciar que impugnarán la relación ante los tribunales. Un portavoz sindical ilustra la situación con dos ejemplos. En su actual redacción, la RPT establece que la titulación requerida para ocupar un puesto de auxiliar de clínica es la de 'veterinario'. También fija como requisito para acceder a un puesto para cuidar a los alumnos en comedores de colegios públicos el título de 'cuidador', una licenciatura desconocida hasta la fecha.