El Gobierno reprocha al líder socialista que 'juegue' con los pactos

El ministro portavoz, Pío Cabanillas, interpretó ayer que la intervención de José Luis Rodríguez Zapatero ante el Comité Federal socialista persiguió 'afianzar un liderazgo interno ante la crisis del PSOE' y lamentó que 'juegue' con pactos como el Antiterrorista. Cabanillas menospreció las condiciones y recomendaciones que el secretario general del PSOE planteó al Gobierno para la validez de los pactos con el Ejecutivo, desde el referido a la lucha contra el terrorismo al ofrecido por Aznar para una 'segunda descentralización'.

Cabanillas atacó a Zapatero por 'inventarse problemas' con los pactos y atribuyó su discurso ante el Comité Federal, crítico con el Ejecutivo, a 'la necesidad de reafirmación de su liderazgo ante la difícil situación interna' por la que atraviesa el PSOE.

Según el Gobierno, Zapatero ha mostrado una 'desconexión evidente de la realidad española' al elegir una intervención de 'tintes muy críticos con la gestión del Gobierno, cuando la sociedad española no lo percibe así'.

Condiciones previas

El ministro portavoz rechazó las condiciones que Zapatero puso para la continuidad y relanzamiento de los pactos con el Gobierno. 'No es bueno poner condiciones previas a un pacto de Estado', respondió Cabanillas a la exigencia del líder socialista de negociar previamente la elección directa de alcaldes para aceptar la negociación del Pacto Local en su conjunto.

La presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias, Rita Barberá (PP), alcaldesa de Valencia, manifestó que la elección directa de alcaldes 'nada tiene que ver' con el Pacto Local, centrado en la cesión de competencias de las autonomías a los muncipios.

En cuanto al Pacto Antiterrorista, Cabanillas rechazó la acusación de 'incumplimiento' de dicho acuerdo por parte del Gobierno. El ministro portavoz no entró siquiera en la acusación de Zapatero al Ejecutivo de 'injerirse' en los asuntos internos del Partido Socialista de Euskadi con motivo de la crisis abierta por la dimisión de su secretario general, Nicolás Redondo Terreros. Algunos ministros la atribuyeron a un 'cambio de orientación' en la estrategia con el nacionalismo vasco.

El ministro de Justicia, Ángel Acebes, restó importancia a la crítica de Zapatero por 'incumplir' el Pacto por la Justicia. Expresó su convicción de que 'asuntos coyunturales' -en referencia a las quejas de que los vocales del Consejo General del Poder Judicial elegidos a propuesta del PP han designado en la mayoría de los casos a magistradores conservadores para plazas vacantes en puestos judiciales relevantes- 'no pondrán en riesgo un acuerdo de todos los grupos parlamentarios'. Acebes insistió en que tal designación no es competencia del Gobierno sino del Poder Judicial.