Estupor por el fallo que rechaza el ensañamiento en la paliza a Clara Vallejo

El fallo de la Sala Segunda del Tribunal Supremo que rechaza el ensañamiento en la brutal paliza recibida por Clara Vallejo Pedrosa en 1997 en Alcaudete (Jaén) por parte de su ex marido, Alfonso Medina, ha sido recibido con estupor e indignación por asociaciones de mujeres, partidos políticos y la Junta de Andalucía. Todos coinciden en que el fallo no es lo suficientemente ejemplarizante como para animar a otras muchas mujeres a denunciar los malos tratos. El agresor tan sólo irá a la cárcel por las lesiones leves que le ocasionó a un guardia civil, pero no por la paliza a su ex mujer.

La directora del IAM advierte de que la resolución judicial desanima a quienes sufren la violencia a denunciar los hechos

Clara Vallejo, una de las primeras mujeres andaluzas que quiso mostrar su rostro para denunciar públicamente la sinrazón de los malos tratos, tuvo que estar hospitalizada durante 10 días por un traumatismo craneoencefálico y conmoción cerebral, además de ser necesario practicarle una intervención quirúrgica para que no perdiera la visión en uno de sus ojos. Fue el desenlace de la brutal paliza que le propinó su ex marido una tarde de septiembre de 1997 en un parque municipal de Alcaudete cuando Clara se opuso a los requerimientos de Alfonso Medina para restablecer una tormentosa vida conyugal que les había llevado a separarse un año antes.

En octubre de 1999, la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Jaén juzgó los hechos y condenó a Alfonso Medina a un año de prisión por un delito de lesiones sin el agravante de ensañamiento, y a seis meses por un delito de resistencia a la autoridad. El agresor eludió la cárcel porque la pena no llegaba a los dos años y no contaba con antecedentes penales. La acusación particular, que abanderó la Diputación de Jaén -entonces contaba con las competencias del Instituto de la Mujer-, recurrió en casación al Tribunal Supremo, que el pasado viernes comunicó a las partes la revocación parcial de la primera sentencia y ampliaba de seis meses a un año de prisión la agresión sobre uno de los guardias civiles que intentó reducirle al personarse en el lugar de los hechos.

De esta manera, el Tribunal Supremo anula el delito de resistencia pasiva y establece otro de atentado a la autoridad, pero no modifica el año de cárcel por el delito de lesiones a Clara Vallejo y sigue sin apreciar el agravante de ensañamiento. Con todo, el hecho de que la nueva pena alcance ahora los dos años provocará el ingreso en prisión de Alfonso Medina, que actualmente vive en Palma de Mallorca.

'Es un logro que este hombre vaya a la cárcel, porque actos así no pueden quedar impunes. Ahora bien, si sólo se tiene en cuenta el atentado a la autoridad se produce una gran alarma social por la indefensión que esta sentencia supone para muchas mujeres'. Natividad Redondo, directora del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) en Jaén, no ha ocultado su decepción por un fallo que, a su juicio, 'no es contundente y desanima a las mujeres que sufren la violencia a denunciar los hechos'.

El Gobierno andaluz también ha criticado la sentencia del Supremo. 'Las resoluciones judiciales deben ser justas, pero también ejemplarizantes para poder erradicar la violencia de género', manifestó el consejero de Presidencia, Gaspar Zarrías, quien, no obstante, admitió no haber estudiado en profundidad el fallo.

La secretaria de Igualdad de la ejecutiva federal del PSOE, Micaela Navarro, no se aparta del estupor social creado por el fallo del Supremo, pero anima a las mujeres que sufren violencia a seguir denunciando las agresiones. 'No hay que conformarse con las primeras sentencias y hay que recurrir buscando la máxima justicia, aunque a veces la lentitud de los órganos judiciales sea un factor que desanime', aseguró.

En Alcaudete, la localidad jiennense donde Clara Vallejo vive con sus tres hijos, los vecinos tampoco están ajenos a esta resolución judicial. Enrique L. R. que fue uno de los primeros ciudadanos en apoyar a Clara tras la agresión, recuerda con rabia los hechos: 'Aquello fue un intento de homicidio y un ensañamiento. Sin embargo, ahora, se le lleva a la cárcel por rozar a un guardia civil. Es increíble'.