_
_
_
_
OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Un espectáculo violento y triste

Estamos asistiendo en estos días al lamentable espectáculo del desalojo de la totalidad de los pájaros que habitaban la plaza de Mina: verdecillos, petirrojos, lavanderas, tórtolas, cotorritas, estorninos..., que han huido horrorizados y despavoridos ante las tremendas detonaciones que, además de a los pájaros, vienen molestando gravemente a todo el vecindario.

Muchos de estos pajarillos, algunas de cuyas especies están protegidas por ley, hacen miles de kilómetros para venir a Cádiz cada invierno desde el norte de Europa y se vienen censando aquí desde hace casi dos siglos. En el caso de los petirrojos es más que probable, dada su fragilidad y pequeño tamaño, que hayan muerto con las detonaciones.

Semejante espectáculo no se había presenciado jamás en Cádiz, ciudad en donde fue fundada -en 1896- la primera Sociedad Protectora de Animales y Plantas de España. Puede que los estorninos hayan causado alguna molestia, dado que han ido siendo desalojados de los distintos lugares por donde andaban dispersos (barriada España, en donde fueron tan bárbaros que talaron dos araucarias centenarias para que los pájaros no se posaran en ellas; Canalejas, plaza de las Tortugas, etc.), viéndose obligados a concentrarse en la plaza de Mina. Alguna vez han manchado la ropa tendida de mi azotea... pero no se han orinado ni cagado en mi puerta, ni me han robado el contenedor, ni la estera de entrada, ni han invadido mi casa. Ni los he visto romper botellas, dejando la calle arrasada y llena de basuras, ni destrozar bancos, quemar papeleras, romper arbolitos, ni convertir la playa en un campo de batalla tras las barbacoas, ni arrojar a la calle 68,5 toneladas de basura tras la erizada y ostionada. Tampoco me consta que hayan declarado guerras ni arrasado países. Los estorninos son también gaditanos y, por lo que se ve, mucho más civilizados que la mayoría de nosotros. Qué intransigentes somos con los seres más indefensos y qué permisivos con el gamberrismo y la barbarie.

Cádiz es una ciudad inhabitable, hormigonada, llena de obras, de ruidos, de motos, de petardos (su venta es libre), de basuras, de antenas de telefonía, con la mayor tasa de mortalidad por cáncer de toda España..., pero el problema, la cabeza de turco, son los estorninos... porque no votan. Luego irán a por las palomas, que tampoco votan. Y no faltó nada para que acabaran con el arbolado de la plaza de Mina. El nazismo va cogiendo fuerza.

Tres mil años de historia para llegar a contemplar este lamentable espectáculo que nos ofrece gratis el Ayuntamiento. Falta cultura y sensibilidad, pero eso... se adquiere en la cuna.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_