La red sin hilos gratuita Madrid Wireless agrupa a 300 vecinos

Antonio, Iván y Daniel, los tres jóvenes que han decidido ponerse manos a la obra para darle a Madrid una red gratuita de conexión inalámbrica, se enteraron el verano pasado de que en ciudades como Seattle o Londres ya estaban montando las suyas.

La idea es que, con un dispositivo capaz de conectarse a una red (ordenador, PDA, teléfono móvil) y con una tarjeta inalámbrica, cualquiera pueda conectarse, a través de uno de los nodos situados en las casas de personas voluntarias, a una red urbana. 'Imagina estar en el Parque del Retiro muy a gusto, y conectarte con tu portátil a la red para bajarte del ordenador de tu despacho los archivos que necesitas para acabar tu trabajo allí mismo. Y todo gratis', explica Daniel.

El problema es que ofrecer conexión inalámbrica gratuita a una red genera suspicacias. 'En nuestra web está colgada la legislación al respecto para que cualquiera compruebe que nada va contra la ley. Operaremos en la banda 802.11b, de uso común y para la que no hacen falta licencias', explica Iván.

'La filosofía del proyecto es ayudar a la comunidad a crecer', asegura Daniel. Ellos lo comparan al nacimiento de Internet, cuando la red servía para compartir conocimientos sin que nadie pudiera imaginar las enormes cantidades de dinero que movería después. De hecho, Antonio asegura que 'dar salida a Internet no es una prioridad de Madrid Wireless. Si el propietario de un nodo quiere compartir su ancho de banda con otros usuarios de la red, bienvenido sea, pero nuestro propósito es conectar a los barrios entre ellos, a las personas que habitan la ciudad'.

Un total de 300 personas se han apuntado ya a la lista de correo, en la que ahora se discute sobre la arquitectura con la que se diseñará la red. Ya hay un nodo instalado en el barrio de Chamberí. 'Para finales del próximo verano, Malasaña tendrá una cobertura más que respetable', cree Antonio. Toda la ciudad, como poco un año.

Apuntarse a este proyecto, o a otros similares que se están poniendo en marcha en Barcelona y Zaragoza, sólo exige una tarjeta de conexión.

Para ofrecerse como nodo, hace falta un Access Point (AP) y una antena (se puede hacer una doméstica con un bote de patatas, por ejemplo). 'El AP puede sustituirse por una CPU programada con un sistema operativo libre' explica Daniel. 'Nosotros mismos ofrecemos apoyo a quienes tengan dificultades con ese software'.Madrid Wireless, que prohibirá los servicios de pago, planea conectarse con otras redes ciudadanas.