El Barça castigará con dureza a Geovanni y a Rochemback

Ni la falta de billetes de avión ni los papeleos burocráticos. Las excusas no les sirvirán de mucho. La directiva del Barça decidió ayer al mediodía, a petición del técnico Carles Rexach, expedientar a los dos jóvenes futbolistas brasileños Fabio Rochemback y Geovanni Deiberson por no presentarse en los dos primeros entrenamientos del año. Los dos jugadores todavía estaban en Brasil en la tarde del día de Año Nuevo cuando la plantilla azulgrana reanudaba los ensayos tras las vacaciones. Y todavía estaban volando cuando, ayer por la mañana, sus compañeros volvieron a entrenarse, bajo la lluvia y un cielo gris, en el Camp Nou. La junta escuchará el lunes las versiones de los dos jugadores, que no conectaron con el club hasta la noche del martes, pero ya tiene decidido sancionarles de forma ejemplar para evitar nuevos actos de indisciplina. El Barça, sumido en una crisis de resultados, sin precedentes desde hace doce años (es octavo, a seis puntos del líder, el Deportivo), no está para semejantes alegrías.

Rochemback y Geovanni llegaron ayer por la tarde a Barcelona, sin decir palabra y, por la tarde, se sumaron a la sesión vespertina del equipo, realizada en el Miniestadi. Ninguno de los dos quiso hablar en público, pero sí tuvieron que dar explicaciones a sus compañeros. El primero argumentó que tuvo que retrasar el vuelo hasta el día 1 porque tenía que firmar obligatoriamente unos papeles para que sus padres pudieran viajar a España y, el segundo, que no encontró billetes. Pero las excusas cayeron en saco roto. El vestuario azulgrana acogió inicialmente con estupor la doble ausencia pero ayer ya destilaba indignación. 'Creo que desde el día 23 han tenido tiempo para comprar los billetes', les reprochó con dureza Sergi, el capitán del Barça. 'Es una falta de respeto hacía mí y supongo que para el resto de los compañeros. Todo el mundo está aquí menos ellos dos y eso no tiene solución. Es una imagen triste en un momento delicado. El equipo está trabajando para recuperar el tono físico y hay dos señores que hacen su vida'.

El Barça acabó el año de la peor forma posible (sucumbió de mala manera en Montjuïc) y lo ha empezado peor. Charly había amenazado a principios de diciembre a sus jugadores con dejarles sin vacaciones sino reaccionaban pero, pese a la última derrota, mantuvo los nueve días de fiesta. Sólo hizo un pequeño retoque en el calendario: programó, como toque de atención, una sesión el día de Año Nuevo a la que faltaron los dos brasileños, llegó tarde Kluivert por perder un avión en Amsterdam y a la que se sumó Frank de Boer justo después de sufrir un pequeño accidente de coche al toparse con otro vehículo cuando entraba por la rampa del aparcamiento subterráneo del Camp Nou.

Mejoría de Rivaldo

Tras tanto altercado, solo la enfermería dio ayer buenas noticias. Rivaldo tenía permiso del club para faltar al entrenamiento del del martes -quizá sus compatriotas incurrieron en el error de que podían recibir el mismo trato- porque se fue de vacaciones a su país y no podía participar en los ensayos hasta superar unas pruebas. El parte médico debió tranquilizar a Rexach: el zurdo ha mejorado del síndrome en sus abductores de la pierna derecha y, en principio, si su progresión no se trunca, tendrá el alta con vistas al partido del domingo, en el Camp Nou, ante el Zaragoza. Gerard también evoluciona posivitamente de su lesión muscular y tanto Luis Enrique como Andersson están a un paso del alta. Sólo Abelardo, operado en marzo, continúa con molestias en el biceps femoral.

El Barça confía en retomar el vuelo este mes de enero al aguardarle un calendario teoricamente asequible (además del Zaragoza, recibe a Osasuna y Sevilla y visita Vallecas). 'Estoy convencido de que vamos a salir de este bache. Quizá nos falta esa confianza que tienen los equipos grandes para superar las dificultades', admitió Sergi. Los azulgrana necesitan los puntos como el agua para no descolgarse del líder: en los dos últimos meses, sólo han ganado dos partidos, empatado otros tantos y perdido cuatro.