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Desde el Pacífico
Columna
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Exceso de información:las propuestas de Stratify

En el mundo informático hay abundancia. Incluso exceso de información. Tanto, que no hay tiempo para leer el diario o responder correos electrónicos. A principios de 2001, Internet contenía más de 4.000 millones de páginas web. Cada día se ampliaba con siete millones. Y según IDC, 8.000 millones de e-mails invadirán diariamente a las empresas en 2002. Hal Varian, director de la Escuela de Gestión de Información y Sistemas de la Universidad de California en Berkeley, afirma: 'La producción mundial asciende anualmente a unos 250 megabytes por cada hombre, mujer y niño. Estamos ahogándonos en un mar de información'. Recordemos que 250 MB equivalen a unos 500 libros y que no todo el mundo lee.

El 15% de los datos que maneja una empresa son estructurados. El 85% restante ('e-mails', presentaciones, cartas, páginas...) contiene información esencial que no se usa
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Ilustración dramática del problema: las autoridades de Estados Unidos quizá tenían indicios, pero no supieron prevenir los ataques del 11 de septiembre. In-Q-Tel, la compañía de capital riesgo de la CIA, acaba de invertir un millón de dólares en Stratify, una empresa de Mountain View, en Silicon Valley, especializada en los datos no estructurados.

Basándose en un estudio realizado por IBM, la start-up considera que apenas el 15% de los datos que maneja una empresa son estructurados. Se refiere a datos cuantificables, como los referentes a la producción, al desempeño de cada departamento o los costos, y que se encuentran reflejados en bases de datos. Pero el 85% restante (correos electrónicos, presentaciones, cartas, páginas web...) contiene información esencial que, hoy por hoy, no es utilizada.

Los empresas basan sus decisiones en la información estructurada. Estos datos 'les permiten resolver asuntos tácticos cuando deberían dedicar mucho más tiempo a cuestiones estratégicas', explica Nimish Mehta, CEO de Stratify.

Stratify ofrece un programa, llamado Discovery System, capaz de leer la mayoría de los formatos. Primero analiza los documentos utilizados por la empresa y, por varios métodos de clasificación, los organiza en categorías y propone una jerarquía. Pero las necesidades de una empresa cambian y sus departamentos pueden tener intereses diferentes. Para paliar esta dificultad, Discovery System permite que los usuarios modifiquen, añadan o eliminen las definiciones que más les convengan. El programa presenta los documentos clasificados en un formato suficientemente entendible para ser útil. La coherencia del conjunto la garantiza un servidor que asegura el acceso a los documentos etiquetados en XML. Mehta reconoce que el exceso de información puede generar confusión. Y contrasta la solución actual, que consiste en no utilizar más que una parte de los datos disponibles (el 15% estructurado), con la de Stratify, que 'permite usarlo todo y agruparlo de manera inteligente'.

Queda por ver si la paradoja de resolver el exceso de información tomando en cuenta un universo cada vez más amplio de datos -eso sí, mejor organizados-es más que un sueño de informático.

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