Apenas unos 'pellizcos' de buena suerte

Magra cosecha para tan gran siembra. La Comunidad Valenciana se gastó en el sorteo de la lotería de Navidad 43.319 millones de pesetas y sólo recuperó 180. Una cifra que parece empequeñecerse aún más si se traduce a euros: 1.080.000. Menos que nada si se la compara con los 13.000 millones de pesetas que dejó el sorteo del pasado año, cuando se vendieron varias series del segundo y tercer premio distribuidos entre Vila-real, Villanueva de Castellón y Meliana. Apenas unos pellizcos de buena suerte para una autonomía que es la tercera en inversión per cápita en el azar, 11.019 pesetas, por detrás de madrileños, que gastan una media de 12.230 pesetas, y aragoneses, con una inversión de 11.165 por habitante.

Los 180 millones que cayeron en la Comunidad se corresponden con una serie del segundo premio que se vendió en Utiel y otros 36 décimos correspondientes a 5 series de dos de los cuatro quintos premios que se vendieron en Valencia, Gandia, Castellón y Orihuela. Tan escasa suerte, de algún modo, se vio compensada por la fortuna de Bartolomé Gómez, un collidor de naranjas en Nules, que viajó hasta Lorca para interesarse por la salud de unos de sus once hijos y comprar dos pavos, y regresó con dos décimos del gordo de Navidad que le proporcionaron 60 millones de pesetas. Ayer, cuando supo de su buena suerte, tiró por el aire la báscula en la que pesaba las naranjas y se acercó a su entidad bancaria habitual donde era un cliente más. Ayer le rindieron pleitesía. El nuevo millonario explicó que al pasar por una administración de lotería de Lorca uno de sus hijos quiso comprar unos décimos porque 'es aquí y nos va a tocar', dijo. Y vaya si tocó.

Bartolomé Gómez no fue el único valenciano que supo de la alegría del gordo. Un vecino de Utiel que trabaja en una empresa murciana distribuyó 270 millones de pesetas entre sus familiares y amigos. Julio Montes tiene su empleo en una industria textil de Molina del Segura y compró nueve décimos. Los agraciados celebraron cumplidamente su suerte en un bar utielano, hasta el extremo de que una de las agraciadas, Pilar Andrés, era incapaz de articular palabra como no fuera para decir que no sabía qué hacer con el dinero. Julio Montes sólo atinó a compararse con Papá Noel.

Al gordo que llegó de Murcia, Utiel sumó otros 144 millones de pesetas. Hasta diez décimos del segundo premio se vendieron en la administración número 2, cuatro de los cuales fueron adquiridos por una mujer que no se quiso identificar, pero que en conversación telefónica con la lotera manifestó encontrarse 'feliz, pero serena y tranquila'. El resto de los agraciados también prefirieron mantenerse en el anonimato, toda vez que los décimos se despacharon en ventanilla.

Gandia, Castellón, Valencia y Orihuela vendieron algunas series de los quintos premios. Una administración ubicada en un hipermercado de la capital de La Safor repartió 7,2 millones; idéntica cantidad fue distribuida por la oficina castellonense número 10 y la 1 oriolana que vendió un solo billete a última hora 'porque era muy feo'. También a última hora de la tarde de ayer, cuando ya estaba a punto de cerrar, la administración número 49 de la calle de Jesús de Valencia vendió los dos décimos de uno de los quintos premios que quedaban en ventanilla a una clienta que ha ganado 14.400.000 pesetas.

La poca fortuna de los valencianos se compensó en parte gracias a una vecina de Gandia que vive en Castellar del Vallés (Barcelona) y al propietario de un bar de Torrevieja que se llevaron 36 y 1.536.000 millones del tercer premio, respectivamente.

Esta información ha sido elaborada por María Fabra, Begoña Navarro y Eva Batalla.