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Los inversores castigan en la Bolsa el plan de reorganización de Fiat

Los títulos del grupo cayeron ayer un 6,6%

Los mercados financieros rechazaron ayer el plan de reajuste de Fiat Auto, la joya del grupo Fiat, que anunció el lunes una doble reestructuración, industrial y financiera, que comportará el cierre de hasta 18 fábricas, 6.000 despidos fuera de Italia y una inyección de capital de más de 3.000 millones de euros. Las acciones de Fiat cayeron un 6,6% en relación al viernes en la Bolsa de Milán, aunque llegaron a perder más del 12% durante la sesión.

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Fiat anuncia el cierre de hasta 18 fábricas y el final de 6.000 empleos

La caída bursátil arrastró también a Ifi e Ifil, las empresas financieras de la familia Agnelli, que posee el 30% del grupo. En la jornada de ayer cambiaron de manos 17,5 millones de acciones del grupo, diez veces la cifra normal, con una depreciación del título que se situó en 17,8 euros tras tocar fondo a 16,78 euros al inicio de la sesión. Los principales sindicatos reclamaron una reunión urgente con la empresa, preocupados por el verdadero alcance del reajuste, que ha recibido, sin embargo, el espaldarazo del Gobierno.

La tormenta que se abate sobre el mercado del automóvil ha obligado a Fiat a reaccionar finalmente. El plan de choque anunciado por el consejo de administración prevé un aumento de capital de 1.000 millones de euros, la puesta en circulación de bonos del grupo por valor de 2.500 millones de euros, convertibles en 32 millones de acciones de la General Motors (es decir, prácticamente se saca a la venta el paquete de acciones, un 6%, que poseía Fiat en el coloso americano) y la cesión de actividades que no forman parte del núcleo esencial, por un valor total de otros 2.000 millones de euros.

Reactivar la actividad

'El objetivo es reactivar la actividad y reducir a 3.000 millones de euros, para el 2002, la deuda del grupo', dijo ayer el consejero delegado de Fiat, Paolo Cantarella.

La deuda total del grupo, en septiembre pasado, ascendía a 7.500 millones de euros. El mayor imperio industrial italiano afronta así uno de los reajustes más importantes de su historia, en un intento desesperado por superar la crisis mundial. Las perspectivas del sector no son rosa. En 2002 se prevé una caída en la venta de coches del 7% o el 8%.

Fiat Auto se estructurará en cuatro grandes apartados: Alfa Romeo, Fiat y Lancia, Actividades Internacionales y Servicios. Cada unidad funcionará de forma autónoma y será responsable de los resultados de la gestión (quedan fuera las marcas Ferrari y Masserati). La cúpula de Fiat no quiso adelantar ayer qué países se verán afectados por los cierres de plantas. Un portavoz de Fiat Ibérica señaló, según Europa Press, que la reestructuración no afectará a las nueve plantas españolas. Fiat sí confirmó que en el área Mercosur (Argentina, Paraguay, Uruguay y Brasil) será prácticamente suprimida la actividad Fiat en Argentina y trasladadas las instalaciones de Iveco a Brasil, porque la reestructuración afectará de hecho a la sucursal de camiones y a la Case New Holland, fabricante de maquinaria agrícola. Fiat había 'adelgazado' ya su envergadura en Europa con una reducción de 1.000 empleos este año en Polonia.

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