Moción de censura contra el alcalde de Calafell, del PSC
Los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Calafell (Baix Penedès), integrada por CiU, el PP y el Grupo Mixto, han presentado una moción de censura contra el alcalde, el socialista Jordi Sánchez, al que reprochan sus intentos de ejecutar proyectos faraónicos, la profusión de contratación municipal directa y una mala gestión diaria que pone en peligro la economía del municipio. El debate de la moción de censura, gestada a raíz de las discrepancias de Sánchez con Josep Parera, también socialista y que acabó ingresando por ellas en el Grupo Mixto, se podría ejecutar a mediados del próximo mes de enero.
Los tres grupos presentaron la moción en el registro municipal a primera hora de la mañana de anteayer, después de unos meses convulsos en los que salieron a flote las discrepancias existentes en el seno del Grupo Socialista entre Parera y el alcalde. La divergencia finalizó con la escisión del concejal, que pasó a formar parte del Grupo Mixto. Después del movimiento de Parera (que sería el alcalde alternativo) y con su voto, la moción podría prosperar con los seis concejales de CiU y los dos del PP. El gobierno actual se mantendría con ocho votos: los seis socialistas, el de un concejal de ERC y el de Carme Olivella, que pese a que siguió los pasos de Parera y pasó a integrar con él el Grupo Mixto, no apoya la alineación de éste con los conservadores.
Los dos concejales disidentes reprocharon a Sánchez su interés por la ejecución de proyectos monumentales y el hecho de que relegara a un segundo plano, según ellos, la acción municipal diaria, en un municipio que la pasada semana llegó a 15.000 habitantes empadronados. Por ello solicitaron la ampliación de los presupuestos en áreas como sanidad y educación. El alcalde prefirió ayer no realizar ninguna declaración, aunque fuentes del PSC han recordado que tanto CiU como el PP fueron firmantes del pacto antitránsfugas.