A la caza del bache
Un equipo contratado por el Ayuntamiento de Almería revisa las calles de la ciudad
Apenas llevan funcionando un mes y ya han realizado 2.500 fotos, con su correspondiente incidencia en el encuadre, e impreso otros tantos informes en los que se detalla la calle o plaza, la localización exacta y el grado de urgencia del desperfecto descubierto. Se trata de la nueva brigada de asistencia técnica de inspección e información del equipamiento urbano de Almería que el Consistorio ha contratado con la empresa Ceasa. El equipo que de forma burlona se conoce como la 'brigada de baches' está integrado y coordinado por una ingeniero de caminos, un arquitecto técnico y una ingeniero técnico industrial. Los tres profesionales, ayudados de un programador informático, han peinado cada una de las calles de Almería, repartidas en tres grandes sectores, y han culminado un primer informe con una radiografía exacta de la ciudad. 'No se trata de contar baches. Son muchas más cosas: estado de los solares y de las zonas de juego, señalización del tráfico, isletas, estado de la vegetación, obras privadas, alumbrado público, limpieza y un largo etcétera', resume Jerónimo Benavides, arquitecto técnico.
Los partes de incidencias que rellenan incluyen una exhaustiva descripción que valora la peligrosidad, la magnitud y la urgencia de la incidencia, además de incluir las causas probables que la han provocado y de asignar responsabilidades. 'Nosotros ofrecemos semanalmente al Ayuntamiento una información completa, exhaustiva y actualizada de los desperfectos de la ciudad. Es algo bastante complicado que desde luego requiere mucha organización', apunta la coordinadora del equipo, María José Jerez.
En el desempeño de su tarea la brigada recorre a pie todas cada una de las calles a examen. Las anécdotas con los vecinos en el mes que llevan de rodaje son ya infinitas. 'Las situaciones más insólitas se producen cuando hacemos la foto del desperfecto. A mí me ha llegado a salir el dueño de algún bar diciendo: 'No tengo licencia de apertura, pero es que la estoy tramitando', cuenta Margarita Sánchez.
La confusión que el trabajo de los tres profesionales despierta entre la población ha dado lugar a más de una propuesta utilitarista: 'Oiga, le importaría a usted echarle un vistazo también a la azotea de mi casa, es que tengo goteras', solicitaron a uno de los técnicos. Incluso hay quienes invitan a café a los brigadistas y 'de paso' encomiendan un recado para el alcalde: 'Dígale al señor Cabrejas que desde que han cerrado el local de la Tercera Edad en el barrio no tenemos donde ir'.
La revisión en los barrios más marginales de la ciudad se practica con contactos que la brigada establece antes de visitar la zona para garantizarse la seguridad. Allí, el baremo establecido por los técnicos, toma un vuelco radical. 'En El Puche, las plazas no son plazas, son escombros. Y allí no es que haya puntos de droga, es que la gente se chuta en la calle. En este barrio una arqueta rota no llama la atención, pero sí en el centro de la ciudad. Y eso también se valora', comenta Jerónimo.
El pasotismo de las empresas
El servicio de la brigada de inspección establecido por el área de Obras Públicas pretende agilizar la operatividad del Ayuntamiento de Almería en la prestación de sus servicios. Por un importe de 13 millones de pesetas -que también incluye los informes de seguridad y salud de todas las obras que acomete el Consistorio-, el área conoce al detalle la situación de cada calle. 'Un Ayuntamiento como éste sólo tiene un arquitecto y dos ingenieros en Obras Públicas. Es una distorsión sacarlos de su trabajo para que vayan a ver un trozo de asfaltado', explica el concejal Juan Carlos Pérez Navas. Pero el segundo objetivo de las inspecciones es el de buscar la responsabilidad contractual de cada una de las empresas contratadas por el Ayuntamiento y cuyas actuaciones dañan el equipamiento urbano. El informe de incidencias elaborado por Ceasa revela un alto porcentaje de desperfectos motivados por la 'mala ejecución de los trabajos' realizados por empresas como Telefónica, Sevillana de Electricidad, la de saneamiento o la concesionaria del servicio de jardines y parques, entre otras. '¿Es problema del Ayuntamiento una arqueta mal colocada? No, lo es de la compañía privada que en vez de asfaltar el perímetro de la arqueta echó cemento, que luego derivó en un socavón. Sin embargo el ciudadano pide responsabilidades al Consistorio', resume Pérez Navas. El delegado de Obras Públicas anuncia, por este motivo, la realización de estudios más detallados por la brigada que delaten y pongan de manifiesto la responsabilidad de las compañías privadas.
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