El fotógrafo araña

PETER PARKER continúa su andanza por el mundo de los videojuegos con un título que, tras debutar primero en PlayStation y luego en Dreamcast, llega ahora al mundo del PC. El fotógrafo mejor dotado para realizar reportajes a vista de pájaro debe enfrentarse por enésima vez al doctor Octopus, quien, en un hábil cambio de estrategia, ha optado por demostrar que ahora es una buena persona y que ha inventado una máquina para ayudar a la gente. Este título de acción da una de cal y otra de arena, pero al final consigue un equilibrio que invita a pasar una fase tras otra con el fin de descubrir la trama.

El usuario encarna a Peter Parker, o lo que es lo mismo, a Spider-man. Desde una cámara posterior al superhéroe, que le permitirá verle de cuerpo entero, deberá dirigirle por el buen camino que lo lleve a neutralizar a los distintos enemigos ayudado por su telaraña. En total el jugador participará en ocho cómics que se suceden a modo de historia y que se dividen cada uno de ellos en varias fases, al término de las cuales es posible guardar los avances. El arácnido héroe tiene además un poder mental que le posibilita localizar fechorías a cambio de algo de dolor de cabeza. La traducción para el jugador es una brújula que ayuda a discernir la vía correcta entre los rascacielos de Nueva York.

El sistema de juego varía dependiendo de la fase, pero se puede englobar dentro del género de las plataformas. Spiderman salta, da puñetazos, patadas y lo más importante, lanza distintas variantes de telas de araña. A saber: pequeños chorros estilo spray de lanzamiento obligado a los novios al término de una boda, tiene poca utilidad a no ser que se mantenga un rato con lo que los enemigos quedan dentro de un capullo que los asfixia; bolas de telaraña que se disparan como si se tratara de pedradas; iglú de telaraña que protege a 'Spidey' y que al romperse bruscamente golpea a los enemigos cercanos; y por último como liana para saltar de un edificio a otro o para alcanzar zonas elevadas. Todo ello usado con cierta coordinación consigue escenas de acción muy cercanas a las plasmadas en la historieta original.

Los recursos no son ilimitados y por ello es necesario recoger iconos que representan telaraña y salud para el personaje, puesto que ambas cosas las va a necesitar, y en abundancia, para enfrentarse a Venom. Venom es el antihéroe que lleva en su interior el principal competidor de Peter Parker en el mundo de la fotografía, Eddie Brock, y que al mismo tiempo es el enemigo número uno de Spiderman. Durante la presentación de la máquina del doctor Octopus un impostor disfrazado de Spiderman irrumpe en la sala y pone en peligro la vida del público, Eddie puede fotografiarlo, pero el Spiderman de pacotilla le arrebata la cámara. Frente a la pérdida de esta oportunidad de desprestigiar a Spiderman, Eddie no puede aguantar más y se convierte en el malvado Venom.

Mientras que la versión para PlayStation se puede calificar de correcta, este Spiderman, al menos técnicamente, ha ido perdiendo fuelle con el paso a Dreamcast y ahora al PC. No cabe duda de que se podrían haber mejorado mucho las texturas de los edificios y objetos, pero lo incomprensible es que se ha dejado la limitación gráfica intacta, con lo que un PC de última generación muestra la espesa niebla necesaria para evitar dibujar más edificios de los técnicamente posibles, cuando el PC podría representar 10 veces más que los que aparecen.

Otra de las cargas que debe soportar este juego es el complicado control motivado por una cámara que en ocasiones no es capaz de centrar la acción donde realmente se produce. Afortunadamente en Spiderman no es necesario apuntar exactamente al enemigo, puesto que si está en un rango de visión frente a Spidey, éste queda seleccionado como enemigo y la telaraña irá hacia él sin remisión. Aunque no le veamos en pantalla.