El sueño de Björk se hace realidad

Vespertine, un disco aparentemente nada fácil y repleto de músicas intimistas que navegan entre el ruidismo, la electrónica y un delicado sinfonismo, ha llevado el nombre Björk a lo más alto de popularidad y ventas en nuestro país. Esta noche la cantante y compositora islandesa refrendará esa creciente popularidad con un único concierto peninsular (en el Gran Teatre del Liceu barcelonés a las 21 horas) cuyas entradas se agotaron, no sin generar una cierta polémica, en menos de cuatro horas. Con todo vendido Björk presentará su disco acompañada de un grupo electrónico, una orquesta de cuerda y un amplio coro femenino.

Medidas de seguridad

La expectación generada por la visita de Björk quedó perfectamente reflejada en la concurrida rueda de prensa de presentación. Un lugar poco habitual para hablar de pop-rock, el Salón de los Espejos del Liceo, y unas medidas de seguridad excepcionales, tanto por parte del entorno de la cantante como del propio local, acogieron a una Björk que, como buena diva en ciernes, acudió a la cita con mas de media hora de retraso.

Menuda, pálida, vestida con discreción (salvo unos enormes tacones de aguja) y exteriorizando una timidez vencida pero no totalmente eliminada, la cantante islandesa tomó asiento, sin duda por casualidad, bajo una frase altamente significativa grabada en el techo: El arte no tiene patria. 'Siempre había soñado poder cantar con una orquesta y un coro pero resulta tremendamente caro y sólo puede hacerse una vez en la vida; está ha sido mi ocasión', explicó para justificar el despliegue escénico de esta gira. 'El verano próximo tendré que hacer una buena tanda de conciertos y festivales para poder pagar lo que estamos perdiendo en estas actuaciones'. A pesar de ese déficit ya anunciado las entradas para los conciertos sobrepasan las cifras habituales. 'Lo sé, desgraciadamente es caro', afirma. 'Es una contradicción: un concierto que quiere ser popular a un precio elevado pero somos 74 personas sobre el escenario y eso es muy caro. Me lo he tomado como un experimento breve y atrevido. Sé que mucha gente se ha quedado sin entradas, sólo puedo decirles que esperen al verano en que organizaremos una gira de conciertos ya sin orquesta y que, lógicamente, serán mucho más baratos'.

Todos los conciertos de la presente gira se están realizando en teatros de ópera, como el Liceo, o en iglesias. 'Un concierto como este en un local pensado para el rock sería un desastre: allí todo suena muy fuerte y yo necesitaba que los sonidos se encontraran naturalmente', prosigue. 'He escogido cada local por sus condiciones acústicas. Necesitaba locales en los que pudiera cantar sin micrófono, en los que una orquesta pudiera sonar sin amplificación y que no fueran ni muy pequeños ni muy grandes. Un local de ópera es idóneo para eso'. Todo mi equipo ha estado más de un año investigando locales a través de publicaciones y de Internet; ahora sería capaz de escribir un libro sobre locales'.

A lo largo de estos últimos meses han corrido noticias y rumores sobre supuestos rechazos de locales como el Teatro Real de Madrid que no han querido ceder su escenario para el concierto. 'Esos vetos no me importan lo más mínimo. No esperaba que todas las puertas se me abrieran de par en par. Siempre han habido grupos y yo respeto todas las opciones'.

Björk habla con contundencia clavando su mirada tremendamente clara en algún punto infinito. Al hablar de cine es contundente: 'No volveré a hacer ninguna película, ya hay bastantes actrices en el mundo'. Sobre las prohibiciones de algunas televisiones a su último video la artistas islandesa muestra igual contundencia: 'Cuando hago un video no pienso en si lo pasarán las televisiones. Sólo pienso en la música'.