De espaldas a las urnas

La moción de censura presentada por el PP y siete ex concejales del Grupo Independiente Liberal (GIL) en Estepona ha puesto en evidencia el fracaso de los pactos contra el transfuguismo firmados por todos los partidos políticos y de los acuerdos entre las fuerzas democráticas tradicionales para aislar fenómenos políticos como el partido del alcalde de Marbella, Jesús Gil.

Sin embargo, Estepona es sólo la última cuenta de un largo rosario de incumplimientos. Desde las elecciones de 1999, más de una quincena de municipios andaluces han sufrido cambios de gobierno municipal. Pero los que más polvareda han levantado han sido aquellos en los que se han visto involucrados ex concejales del GIL, a quienes todos los responsables políticos de los partidos habían rechazado públicamente hace dos años.

Sin embargo, en Málaga el GIL fue el primer partido en perder una alcaldía en mayo de 2000; concretamente la de Casares, donde fue precisamente el ex alcalde gilista, Francisco Herrera, permitió que Juan Sánchez, de IU, se hiciera con el gobierno municipal. IU optó por esta maniobra después de perder el apoyo del edil del PP Diego Ledesma, quien puso como condición para votar a Sánchez la inclusión en el equipo de gobierno de otros cuatro ex concejales del GIL.

En Manilva fue IU la perjudicada. En noviembre de 2000, el socialista Emilio López Berenguer desbancó a la alcaldesa de IU María Antonia Muñoz con el apoyo de una concejala de su grupo y de los cinco ex ediles del GIL. El PSOE suspendió de militancia a los tránsfugas, que ahora han solicitado su reingreso en el partido.

El pueblo de Tolox también ha sufrido un cambio de gobierno. En este caso fue el ex alcalde del PP quien, tras enfrentarse con su partido, abandonó el gobierno y apoyó a los socialistas. También se han registrado casos de transfuguismo en Vélez-Málaga, Mijas y Fuengirola, si bien no han provocado cambios de gobierno.

En Cádiz, el mapa político ha sufrido bastantes alteraciones desde 1999. El gran beneficiado ha sido el PP, que gobierna o cogobierna en nueve ayuntamientos, pese a que sólo fue la lista más votada en cuatro. Para ampliar su cuota de poder, los populares se han aliado con partidos independientes y tránsfugas del GIL, del PA e IU.

El último incumplimiento del pacto antitransfuguismo se ha vivido en La Línea, donde el alcalde gilista Juan Carlos Juárez y sus 16 ediles se afiliaron al PP, que tenía cuatro concejales. El PP se ha buscado también extraños socios en otros cinco municipios. En Tarifa, el alcalde es Juan Andrés Gil, un tránsfuga de IU, que gobierna con apoyo del PP y del independiente TAIP. Fernando Palma, un tránsfuga del GIL que se pasó al PP junto con otros dos ediles, gobierna en San Roque gracias al pacto con el PP y los independientes. En Algodonales gobierna Antonio J. Gómez, del PP, con el apoyo del PA y de un tránsfuga de IU. El alcalde de Sanlúcar de Barrameda, el también popular Juan Rodríguez, cuenta con el apoyo de dos tránsfugas del PA. Y en Barbate, el alcalde es Juan Manuel de Jesús, del PP, y gobierna en minoría con el apoyo de dos tránsfugas independientes de ADELMA.

La política de pactos del PP no ha ruborizado a sus dirigentes, que niegan haber violado los pactos nacionales antitransfugismo y anti-GIL. 'No son tránsfugas sino personas que se han afiliado al PP después de salir de su partido voluntariamente', dijo Teófila Martínez en referencia al pacto de La Línea.

Dúrcal, Otura, Ogíjares, La Zubia, Salobreña o Alhama son algunos de los municipios granadinos donde los grupos políticos han roto el acuerdo para provocar un cambio en la alcaldía.

Dúrcal sufrió hace un año un cambio de gobierno gracias a un pacto del PSOE con IU y un tránsfuga del PP. El PSOE expedientó a sus concejales por haber aceptado el apoyo del edil del PP, que a su vez fue expulsado de su partido, pero actualmente ha quedado suspendida esta sanción tras las alegaciones presentadas por los implicados.

En Otura, el PP ha arrebatado la alcaldía al PSOE gracias al concejal de IU, que había suscrito un pacto de gobierno con los socialistas. El acuerdo entre PSOE, IU y PA en el Ayuntamiento de Granada se mantiene a pesar de la expulsión de su partido del concejal andalucista Jesús Valenzuela, que el PP considera un tránsfuga. Este pacto no ha tenido éxito en otros municipios, donde IU y PA han terminado por alinearse con el PP. Es el caso de Ogíjares, donde la concejala andalucista ha retirado su apoyo al PSOE para brindárselo al PP.

Los únicos puntos negros en la provincia de Jaén son Huesa y Pegalajar. En los dos se incumplió el pacto de progreso entre PSOE e IU y éste último partido se alió con el PP para evitar a los socialistas, que fueron los más votados. La dirección provincial de IU no pudo evitarlo. Las cuestiones personales pudieron más que los razonamientos políticos y ahora en ambos pueblos se turnan alcaldes de PP e IU. En el resto de localidades en las que IU y PSOE suman mayoría se suscribieron acuerdos municipales para gobernar y los pactos están funcionando con normalidad en pueblos grandes de Jaén como Ubeda o Andújar.

Información elaborada por: Meme del Río, Fernando Pérez Monguió, Lola Quero y Carmen del Arco.

Información elaborada por: Meme del Río, Fernando Pérez Monguió, Lola Quero y Carmen del Arco.