Villacampa: 'Hay que ser muy fuerte para hacer lo que Jordan'

Jordi Villacampa y Michael Jordan: vidas paralelas. Los dos nacieron en 1963, los dos fueron aleros, a ambos les faltan un par de centímetros para los dos metros y los dos ganaron su primer título en 1991 con el Joventut y los Bulls de Chicago. Villacampa se retiró en 1997 y Jordan lo hizo un año después. Y los dos pasaron a los despachos: Villacampa, como presidente del Joventut, y Jordan, como accionista y presidente de operaciones de los Wizards de Washington. 'Es más', agrega Villacampa, 'él juega al golf y yo también. Aunque yo tengo un hándicap 15, muy lejos todavía del suyo, que me parece que es un 4'.

Hace dos meses Villacampa volvió a vestirse de corto para disputar un partido de veteranos, Barcelona-Joventut, relativamente en serio: 'La prueba no me fue mal. Anoté unos 15 puntos. Físicamente, me encontré potable. Y eso que hay gente que se conserva muy bien, como Nacho [Solozábal], Andrés [Jiménez] y Chichi [Creus]. Pero durante la siguiente semana no podía ni moverme. Estaba baldado. Me encuentro bien físicamente, pero mi cuerpo ha perdido la rutina del esfuerzo intenso que requiere jugar un partido'. Y eso, también, que Villacampa no ha engordado excesivamente -pesa 99 kilos, cuatro más que cuando era jugador-, cuida su dieta y corre 40 minutos cuatro días a la semana.

Pero no es el aspecto físico el que más le preocuparía en una hipotética vuelta a las canchas: 'Para mí, lo más complicado sería afrontar el aspecto psicológico. Dependería mucho de la ilusión y motivación que tuviera y de mi dureza mental para soportar los añadidos que supone jugar como profesional: cumplir las expectativas, asimilar los viajes, adaptarme de nuevo al equipo y encajar lo que seguramente tendría que oír, cosas como '¡viejo, retírate!' o 'estás acabado'. Hay que ser muy fuerte para volver a jugar a los 38 años' como Jordan.

Joaquim Forteza, ex preparador físico del Joventut y ahora preparador del tenista Carlos Moyà y del campeón del mundo sub 23 de bicicleta de montaña José Antonio Hermida, entre otros, considera viable el retorno de Villacampa, al menos desde el punto de vista físico: 'Hay condicionantes, como el de las lesiones. Pero si, una vez concluida su carrera, hubiera hecho un mínimo trabajo de mantenimiento y ejercitado el tiro , podría volver. ¿Por qué no? Está demostrado que por encima de los 30 años se pueden obtener muy buenas prestaciones físicas'.

Jordan sufrió una sola lesión de importancia a lo largo de su carrera, una fractura en un pie que le mantuvo apartado de las pistas durante 64 partidos en 1986, y Villacampa pasó tres veces por el quirófano por problemas de tobillo, rótula y menisco. 'Jordan es un ejemplo de atleta, pero el físico de Jordi era un portento', dice Forteza; 'era un jugador muy explosivo, con una potencia brutal, que rompía en este aspecto, y muy completo porque poseía una buena capacidad aeróbica y era capaz de entrenarse durante mucho tiempo'.

Forteza considera que para adaptarse físicamente de nuevo a la competición Villacampa necesitaría cuatro meses de entrenamientos específicos: 'Con ese tiempo, siguiendo una buena dieta y buenos hábitos de horarios y descanso, y teniendo en cuenta su bagaje y que no es una persona sedentaria, le pongo a tono. Luego quedaría por ver el juego, el entorno...'.

Villacampa habla de su hipotético desafío: 'Yo tampoco veo imposible que pudiera regresar a la Liga ACB. Ahora bien, después de entrenarme durante cuatro meses y para jugar unos 12 minutos de calidad. Pero, claro, todo depende de en qué equipo estuviera y qué se exigiera de mí. Está claro que la gente quiere ver al mejor Jordan. Si anotar 17 puntos de media sería un éxito para cualquier jugador de la NBA, si él no anota 30 y hace unos cuantos mates parecerá que ha fracasado. Mi estilo de juego era muy físico y tendría que adaptarme a otras facetas, de la misma manera que está haciendo Jordan'. Pero, después de dejar volar la imaginación, Villacampa recupera su papel de frío ejecutivo: 'Yo he hecho cosas que no ha hecho la gente, pero volver a vestirme de corto... No sería capaz de hacerme un contrato para volver a jugar'.