El Festival Art Futura arranca hoy en Barcelona la edición que cierra etapa

Montxo Algora, director de la exhibición de arte digital Art Futura (www.artfutura.org), que comienza hoy en el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB), avanza que el festival 'vuelve a Barcelona para quedarse, para crecer cerrando ahora una etapa y comenzando una nueva el próximo año'.

Enredado entre ordenadores, pantallas de plasma y videoconsolas de última generación e interrumpido constantemente por el teléfono móvil, Algora aseguraba ayer que el regreso de Art Futura a la ciudad donde nació en 1990, tras su paso por Madrid y Sevilla, significa crecer y 'abarcar nuevas cosas, pero no para destruir lo realizado en este tiempo. Se trata de ampliar el programa del festival dentro del arte digital, especialmente dedicándose a la nueva generación de videojuegos como los creadores de arte digital en tiempo real y el arte en la red'.

Barcelona, según Algora, vuelve a ser el escenario ideal para revisar los principios de Art Futura, 'primero, porque tiene al CCCB como sede, el centro de cultura viva más importante que existe en España. Segundo, porque esta ciudad pasa por un momento muy bueno, sobre todo en lo que se refiere al arte digital. Quizá ahora no sea muy evidente, pero todo este movimiento está a punto de florecer y el festival debe estar allí para mostrarlo'.

Parte de estas nuevas propuestas se presentan desde hoy en el ciclo BCN 2001, donde participan medio centenar de diseñadores y creadores digitales que trabajan en la ciudad, 'desde el reconocido Mariscal hasta nuevos nombres ya muy importantes, como Vasava. Se trata de tomarle el pulso a Barcelona en un día y medio, y desde allí, tirar hacia el futuro'. El grupo británico Tomato, al que se dedica una retrospectiva, es también un buen ejemplo de lo que llega en la creación digital, 'porque no plantean el arte dentro de los circuitos clásicos, sino que lo hacen de forma multidisciplinaria, en campañas publicitarias, títulos de créditos, exposiciones interactivas o Internet. Ellos renuncian a la individualidad del artista y se presentan como colectivo, algo novedoso'.

También sale del circuito tradicional el net-art, arte por la red, que tiene como espina dorsal en Art Futura la exposición Digital jam. 'Ponemos sobre el tapete las nuevas herramientas por Internet, aún incipientes pero que serán muy poderosas. También se analiza el fenómeno peer-to-peer, la inteligencia distribuida, es decir, miles de ordenadores intercambiando información para crear arte de forma colectiva'. El videojuego, la segunda industria del ocio en Estados Unidos por volumen de negocio, es otro de los ejes del festival con una exposición que repasa tres décadas de 'creación de realidad virtual en tiempo real'. Así, se analiza Sims, el juego más vendido el año pasado, 'como un hito que marca el nacimiento el nuevo modelo dentro del videojuego'.