Pilar Giménez-Reyna detalló a la juez cómo medió su hermano a favor de Gescartera
'Enrique llega a la conclusión de que una parte del consejo [de la CNMV] se entera y otra no'
Pilar Giménez-Reyna, imputada en el caso Gescartera y en prisión desde el pasado 18 de septiembre, declaró ante la juez Teresa Palacios cómo pidió ayuda a su hermano Enrique para hacer frente a la inspección que la CNMV abrió en diciembre de 1998; aseguró que su 'hermano llega a la conclusión de que hay una parte del consejo que se entera de lo que está pasando y otra parte del consejo que no lo sabe'; que él le dijo que 'las cosas eran muy graves' pero que ella no se preocupara. Después contó cómo también Pilar Valiente acudió en ayuda de Gescartera.
Pilar Giménez-Reyna confirmó punto por punto ante la juez Teresa Palacios las anotaciones de su agenda y confesó tanto la mediación de su hermano Enrique como la de Pilar Valiente en el rescate de Gescartera.
'Yo a mi hermano recurro porque estoy preocupada', contestó Pilar Giménez-Reyna a la juez, según consta textualmente en su declaración del pasado 18 de septiembre a la que ha tenido acceso este diario. Palacios le había preguntado cuándo y por qué pidió ayuda a Enrique Giménez-Reyna. 'En el último expediente ése del 98 (...) Empezaron en el 98 y se terminó en el... de hecho el año 2000', relata Pilar. 'Yo decido un día hablar con mi hermano, digo: está pasando esto y a mí me gustaría tener...'.
La juez le interrumpió: '¿Esto, qué es?' Y ella le cuenta que la CNMV ha iniciado una inspección a Gescartera, que en esas fechas dirigía David Vives. 'Y entonces mi hermano llega a una conclusión, según se informa, de que hay una parte del consejo que se entera de lo que está pasando y otra parte del consejo que no lo sabe'. Pilar añade que su hermano 'iba a hablar con...' pero no llega a decir con quién, y subraya que 'él no estaba bien enterado a través del señor [Juan] Fernández Armesto, porque allí se llevaban las cosas desde dos puntos'. La imputada sigue: 'Llega un momento en que me dice que las cosas eran muy graves'. Pero también le dijo: 'Tú no te preocupes porque esto no es nada (...) Yo me ocupo de todo'.
Ese 'todo', según la declaración de Pilar Giménez-Reyna, se resumía como sigue: 'Había una parte del consejo, como le he dicho, que no atendía a razones, que no conocían las realidades, que el señor [David] Vives, y el señor [Juan] Fernández Armesto y el señor [José Manuel] Barberán eran, palabras textuales: 'las tres personas que siempre salían sus nombres' e iban en contra totalmente de ellos, y que el resto del consejo [de la CNMV] o se enteraba de lo que pasaba y que ellos eran los que llevaban todo'.
La juez le pregunta después 'qué significa 'Pilar Valiente da un revés a D. Vives', uno de los apuntes más conocidos de su agenda. Ella intenta esquivar la pregunta interesándose por si D. significa Daniel o David. La instructora le dice que eso 'es lo de menos' y, tras una serie de respuestas incongruentes, dice 'Enrique me llama'. La juez intenta que no vuelva a escabullirse: 'Bien. Punto. Y dice: 'Nos pide que aguantemos'. ¿Quién se lo pide? ¿Quién le llama?'. Ella intenta de nuevo escurrirse con respuestas inconexas, pero la juez insiste y la imputada confiesa: 'En este caso no sé si Enrique o Pilar Valiente'.
La magistrada sigue: 'Y ¿qué tienen que aguantar?'. '¿Qué?', responde ella. '¿Qué tienen que aguantar ustedes?', insiste Palacios. Por fin declara: 'Que aguantemos la inspección, que aguantemos la supervisión, que hay que salir adelante bien'.
La juez aprovecha ese momento para pedirle que aclare otro apunte de su agenda: 'No dar nombres, cheques portador. No somos la A.T.' La imputada responde: 'Nos pide que aguantemos, que no, no dar los nombres de cheques al portador, que no somos la Agencia Tributaria'. Palacios se interesa por quién les da esas instrucciones. Tras intentar escabullirse, acaba: 'Pues no le puedo decir en este momento si Enrique o Pilar Valiente'.
En ese momento interviene el fiscal para recordar a la imputada que, durante toda su declaración anterior, había mantenido que no conoció a Pilar Valiente hasta el otoño del pasado año y que estos apuntes de su agenda corresponden a la primavera de 1999. 'Usted acaba de decir que con Pilar Valiente no había hablado', le recuerda el fiscal. 'Yo no, yo no, no. No he hablado', dice ella. 'Entonces no se lo pudo decir Pilar Valiente', inquiere el fiscal. 'Tendría que ser Enrique', concluye la imputada.
La mediación de Pilar Valiente y Enrique Giménez-Reyna vuelve a aparecer en mayo de 2000, poco antes de que la CNMV decidiera rebajar la sanción, de muy grave a grave, a Gescartera. El fiscal acababa de recordar a la imputada que el 10 de marzo fue al funeral por el padre de Pilar Valiente. 'Sí, sí. Y no la conocía. Y además no estuve con ella siquiera', respondió Pilar Giménez-Reyna. El fiscal continúa: 'Aquí vuelve a aparecer otra referencia de su hermano (...) el 10 de mayo de 2000 (...) Enrique dice que aceptar y alegar. Pilar Valiente no sabía nada de la Audiencia Nacional por lo contrario ... por lo...'. Ella se lo explica: 'Por lo contencioso'. El fiscal hace como que no se entera y ella se lo aclara: 'Mi hermano, en su interés de esto, me dice que aceptemos como sea'. El fiscal le pregunta: '¿Aceptar y alegar?'. Pilar responde: 'Que se acepte lo que nos pongan (...) y que si no recurrir a la Audiencia Nacional por lo contencioso'. Eso ocurría el 10 de mayo, cuando el expediente a Gescartera todavía contemplaba una sanción muy grave. Pero el día 11 esa sanción pasó a ser sólo grave, quizá para que no fuera necesario recurrir 'por lo contencioso'.
Pilar Giménez-Reyna le contó también a la juez que su hermano y Antonio Camacho se conocen desde 1995, que fue ella quien pidió a Enrique Giménez-Reyna que concertara una comida entre Pilar Valiente y Antonio Camacho, y que en esa comida, la recién nombrada presidenta de la CNMV mostró mucho interés por la ONCE.
La imputada también declaró que, pese a la salida de Camacho del consejo de Gescartera, estaba claro que él era el dueño. 'Pienso que en la Comisión tenían que saber que Camacho era la persona que lo llevaba todo. Digo yo, se me ocurre, si yo lo sabía, ¿Cómo no lo iban a saber?'.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.