Gestoras pedirá dinero a empresas para combatir la dispersión de presos

La dispersión de los presos de ETA tiene precio: 3.570 millones de pesetas anuales, según Gestoras pro Amnistía, organización que ha puesto en marcha este mes una campaña de captación de fondos para hacer frente a los gastos que genera 'la represión' contra el pueblo vasco. Los portavoces de Gestoras Juan María Olano y Jagoba Terrones explicaron ayer en una rueda de prensa que la campaña se llevará a cabo durante octubre y noviembre mediante el reparto de un díptico en comercios y centros de trabajo de toda Euskadi, que incluye un cupón de domiciliación bancaria para cuotas trimestrales.

Olano rechazó las críticas efectuadas por numerosos sectores sociales y políticos por anteriores recolectas organizadas también por Gestoras, que han sido catalogadas como una forma de impuesto revolucionario recaudado mediante coacción. Y dijo que esta nueva campaña está basada en 'la libre adhesión' y persigue la colaboración 'voluntaria' de los ciudadanos.

Con ese dinero, Gestoras pretende hacer frente a la 'auténtica extorsión económica al conjunto de Euskal Herria', basada, según alega, en la política de dispersión penitenciaria, la 'desasistencia' médica a los reclusos y las dificultades de la defensa jurídica. Algo que Gestoras tiene cifrado: los viajes de los familiares para visitar a los presos de ETA originan unos 3.500 millones de pesetas de gastos al año y la cobertura de asistencia jurídica y médica, cerca de 70 millones.

Por otro lado, el Grupo Municipal del PSE-EE en Salvatierra-Agurain (Álava) ha denunciado públicamente que el programa de las fiestas de la localidad, que empiezan este fin de semana, incluye un 'homenaje a los presos', algo que los socialistas tildan de 'insulto a las víctimas del terrorismo'.

El PSE recuerda que en el pleno del pasado 26 de septiembre hizo un ruego al equipo de Gobierno (PNV-EA, liderado por el alcalde, Iñaki Beraza, de EA), solicitando que se retirase dicho homenaje, pero 'ha hecho oídos sordos'. '¿Acaso tienen más derecho los verdugos que las víctimas?', se preguntó ayer el PSE.