Ciencia-ficción agroalimentaria

Los cereales resistentes a enfermedades y plagas, los fertilizantes derivados de productos naturales que mejoran el rendimiento de las cosechas o un programa informático que gestiona por sí solo los cuidados de un olivar. Son productos de alta tecnología biológica, algunos de ellos incluso parecen sacados de novelas de ciencia ficción sobre un futuro civilizado y feliz. Todos esos artículos y servicios son una realidad que idea, crea, desarrolla y comercializa una empresa andaluza.

NewBioTechnic (NBT) es una joven empresa sevillana, fundada en 1999, que centra su actividad en la biotecnología aplicada a la agricultura y a la agroalimentación. La compañía desarrolla dos áreas principales de actividad: el control biológico de cultivos y la biología molecular aplicada al sector agrícola. Son formulaciones técnicas de difícil comprensión para el lego, pero hacen referencia a casos como el del hongo Trichoderma, con el que NBT experimenta para, mediante modificaciones genéticas de variedades vegetales comestibles, hacerlas resistentes a enfermedades y lograr así, con métodos y componentes naturales, disminuir la aplicación de pesticidas químicos.

La compañía participa en los ensayos espaciales de un sistema de cristalización de proteínas

NBT pretende crear soluciones respetuosas con el medio ambiente en la producción agraria, convitiéndose en una alternativa a los productos químicos. 'Las aplicaciones en la industria agroalimentaria de genes, proteínas y otros compuestos, obtenidos a partir de seres vivos, es una actividad aún incipiente, pero posee una gran potencialidad, debido a la riqueza molecular de la naturaleza, bastante desconocida todavía', dice Manuel Troncoso, gerente de la compañía.

El proyecto de crear una empresa especializada en biotecnología aplicada al sector agrícola surgió en 1998, de un grupo de investigadores especializados, que encontraron el respaldo financiero de la caja de ahorros El Monte, que es la principal accionesta a través de una sociedad auxiliar.

Los gestores de NBT consideran que el suyo es un caso excepcional en el panorama empresarial español por tres razones: su apuesta por el I+D (investigación y desarrollo), un modelo en el que España sigue estando a la cola de los países europeos desarrollados pero al que la empresa sevillana dedica el 60% de su presupuesto y el 70% de su plantilla; su dedicación a la biotecnología, un segmento de mercado en expansión por los constantes hallazgos científicos en materias como la genética, la biología molecular, la bioquímica o la mibrobiología; y la combinación que NBT practica de ambas características con el objetivo de aprovechar la importancia que el sector de la agroalimentación tiene en Andalucía.

En su dedicación al I+D, la empresa sevillana está especialmente orgullosa de la estrecha colaboración que mantiene con diversos centros públicos y privados de investigación, no sólo andaluces o españoles, sino de todo el mundo. En la actualidad, mantiene acuerdos de colaboración con 18 grupos de investigación, varios de ellos pertenecientes a universidades como las de Sevilla, Salamanca, Nápoles, Viena o Texas.

Una de las instituciones con las que NBT colabora más estrechamente es el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), lo que ha permitido que la empresa sevillana participe a través de un grupo de investigación granadino en los ensayos espaciales de un novedoso sistema de cristalización de proteinas, cuya patente mundial tiene NBT. Estos ensayos se ralizan en una misión espacial de la Agencia Espacial Europea (ESA, en sus siglas en inglés) que salió al espacio a finales de agosto.

La empresa contará en breve con una planta de producción pre-industrial de artículos de biocontrol, lo que permitirá empezar a comercializa la marca NBT. El proyecto es compartido con el Centro de Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) y con el Ministerio de Ciencia y Tecnología.

Ese nuevo impulso industrial coicide en el tiempo con la primera de las tres ampliaciones de capital que la empresa acometerá hasta el año 2003, por una cifra global de 170 millones de pesetas. Una apuesta decidida por las nuevas tecnologías, ejemplo de que la ciencia ficción, como cualquier ficción, es fácilmente superada por la realidad, una realidad que se desarrolla en Andalucía y que pronto entrará en todos los carros de la compra y frigoríficos andaluces.

Datos de interés

Dirección

Avenida Américo Vespucio, 69. Local 3. Isla de la Cartuja (Sevilla).

Tlf. 95 408 10 31

www.newbiotechnic.com

Empleos

17

Facturación

40 millones para 2001

Producción

Biotecnología aplicada a la agricultura y la agroalimentación