Una historia de hace millones de años
El Planetario de Madrid inaugura mañana una exposición sobre los orígenes del ser humano
Hace 2,3 millones de años, una madre estaba jugando con su hijo de tres años en un paraje desierto en Taung (actual Suráfrica). Todo permanecía tranquilo, en silencio, hasta que las garras de un águila que se había acercado silenciosa a la pareja arrancaron de cuajo al niño de los brazos de la mujer, que no pudo hacer más que gritar desesperada. El águila se llevó al pequeño a un nido y allí lo devoró, en minutos, dejando sólo los huesos. Millones de años después, en 1924, unos científicos encontraron el cráneo del pequeño. El descubrimiento fue el primer fósil de homínido hallado en África, y desde entonces se le conoce como El niño de Taung.
Historias como éstas se pueden encontrar en la exposición que, desde mañana y por tiempo indefinido, ofrece el Planetario de Madrid (parque de Enrique Tierno Galván) bajo el título Homínidos: el origen del hombre. Con reproducciones de fósiles y de homínidos muy 'rigurosas', según los organizadores, la muestra recorre el origen del ser humano desde hace más de cuatro millones de años. 'Hemos querido dar importancia a lo que pasó hace tiempo en la Tierra, porque es el único lugar donde con certeza sabemos que hay vida humana', explicó ayer Asunción Sánchez, directora del Planetario y comisaria de la exposición junto a Ana Gracia. 'Hemos bajado el lenguaje científico para que lo pueda entender todo el mundo, hasta los niños más pequeños', apuntó Gracia.
La idea de montar Homínidos: el origen del hombre surgió en 1998 de la mano del codirector del yacimiento de Atapuerca, Juan Luis Arsuaga. 'Llevábamos mucho tiempo pensando en esta exposición y se ha hecho con una gran base científica, con mucha información', comentó Arsuaga delante de varias esculturas de homínidos que reproducen el encuentro sorpresa que tuvo lugar hace 35.000 años entre el hombre de Cromagnon y el de Neanderthal. 'Se vieron por primera vez y hubo un cruce muy fuerte de miradas, de emociones', explicó el científico.
La escultura que representa al hombre de Cromagnon lleva un collar con colmillos al más puro estilo hippy. 'El color de la piel, del pelo, la ropa que llevan puesta... No es algo caprichoso, sino fruto de la investigación', advirtió Arsuaga.
En el módulo dedicado al hombre de Neanderthal se explica que éste desapareció hace 28.000 años y que habitó en periodos glaciares muy fríos en Europa. Usaba los dientes como tercera mano para cortar carne y curtir pieles. Además, una de sus prácticas más comunes era la caza del mamut.
En la exposición hay otros datos curiosos, como que de nuestro antepasado más próximo, el Homo antecessor, hemos heredado la cara pequeña con los pómulos más marcados. O que este mismo Homo antecessor, que vivió hace 800.000 años, fue el primero en dar muestras de violencia, ya por aquel entonces, al comerse a los mismos de su especie en la que ha sido denominada 'la primera forma de canibalismo'. Todo un descubrimiento de nuestros antepasados.
'En definitiva, los humanos somos polvo de estrellas, y de ahí es de donde venimos', concluyó Arsuaga. La exposición ofrece así la posibilidad de mirar atrás en nuestra historia nada reciente y ver si de verdad, después de millones de años, hemos evolucionado algo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.