La Comisión de Telecomunicaciones paraliza el servicio que permite hablar por móvil en el metro

La Comisión del Mercado de Telecomunicaciones, el organismo que vigila el sector, considera que la concesión en exclusiva a la empresa Metrocall de la red que permite ofrecer cobertura a los telefónos móviles en el interior del metro no se ajusta a las reglas de la competencia, y ha dictado una resolución que paraliza el inicio del servicio. El dictamen de la CMT advierte a la Comunidad y a Metro de que deben dejar que compañías como Telefónica, Airtel o Amena tiendan su red propia en el metro. Miles de viajeros tendrán que seguir esperando para poder hablar por su móvil.

Hablar por el teléfono móvil en el metro no va a ser fácil. A las dificultades técnicas que ya han provocado un retraso de casi nueve meses en los planes iniciales se suma ahora la pugna que ha surgido entre la Consejería de Transportes de la Comunidad y la CMT, el organismo dependiente del Ministerio de Economía encargado de vigilar el sector de las telecomunicaciones a escala nacional.

La empresa Metrocall, sociedad participada en un 60% por la empresa Tecnocom y en un 40% por Metro de Madrid, obtuvo en noviembre de 2001 el derecho a desplegar una red en el metro que permitiera dar cobertura a los móviles de los miles de viajeros que utilizan a diario este medio de transporte público.

Las compañías de móviles, encabezadas por Telefónica Móviles, con las que Metrocall ha negociado infructuosamente desde la obtención de la concesión, se sentían discriminadas por la Consejería de Transportes y Metro al no permitírseles dar servicio de telefonía móvil mediante el tendido de su propia infraestructura. Por eso recurrieron a la CMT, que ahora les ha dado la razón.

'Competencia efectiva'

Una resolución del Consejo de la CMT del pasado día 20 declara que 'en la actualidad no existen condiciones de competencia efectiva en la prestación del servicio soporte del servicio de telefonía móvil'.

La resolución añade que en tanto la Comisión no declare que existen dichas condiciones de competencia efectiva, 'ningún operador podrá iniciar la prestación del servicio' sin la previa comunicación a la Comisión y con el permiso de ésta. La CMT dará el visto bueno sólo en el caso de que se den las mismas oportunidades a todas las compañías que quieran ofrecer su servicio, para lo que tienen derecho a montar su propia red, en lugar de verse obligadas a alquilar la de Metrocall.

Metro alegaba en su defensa su derecho a utilizar las instalaciones ferroviarias, no reconociendo a la CMT las competencias para obligar a compartirlas o cederlas si así lo considera. Además, la sociedad pública sostenía que no daba ninguna ventaja competitiva a Metrocall, puesto que esta empresa se limitaría a prestar la red para dar cobertura, sin convertirse en ningún momento en operador.

Además del perjuicio para los usuarios de teléfono móvil, la resolución de la CMT deja en el aire un proyecto en el que hay comprometida una inversión de 9.500 millones de pesetas, que ya iba con retraso. La única línea que dispone ahora mismo de cobertura para móviles es la 8 (Mar de Cristal-Barajas), y su funcionamiento servirá de prueba para extender después el sistema a toda la red.

La primera fase de este despliegue pretende cubrir la líneas 1 (Plaza Castilla-Congosto) y Circular para finales de este año, y para junio del próximo año concluir el tramo que une Nuevos Ministerios y el aeropuerto de Barajas. También estarán cubiertos los 80 kilómetros de pasillos, vestíbulos, taquillas, escaleras y estaciones de estas líneas. En la segunda fase, la red se extenderá al resto, hasta completar la red en 2006.

Alquiler de la red

La empresa Metrocall, que sólo pone la red, ha buscado, en vano, llegar a un acuerdo con las compañías de móviles mediante distintas fórmulas, como la de cobrar un canon fijo por el alquiler de la red y otro variable según el tráfico de cada compañía, o incluso barajó darles entrada en el capital de la propia sociedad. Pero el acuerdo no ha sido posible y las operadoras de móviles, tras la resolución de la CMT, se sentirán reforzadas para apretar las tuercas en la negociación.

Ahora se abre también un conflicto de competencias entre la CMT y el Gobierno regional madrileño. De hecho, el conflicto ya está encima de la mesa, puesto que la CMT solicitó información al consejero de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes, Luis Eduardo Cortés, en dos ocasiones (sendas cartas de 24 de mayo y 22 de junio pasados) sin recibir respuesta alguna. Además de la Comunidad, las partes personadas son, por una parte, Metrocall y Metro de Madrid, y por la otra, Telefónica, Airtel, Amena y Xfera.