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Goenaga presenta en Bilbao todo el vigor del erotismo en decenas de óleos, bocetos y dibujos

El pintor se ha inspirado en unos grabados chinos para crear las obras de 'Postura-txinarrak'

El pintor Juan Luis Goenaga (San Sebastián, 1950) inauguró ayer en la galería Epelde & Mardaras de Bilbao la exposición Postura-txinarrak, una potente colección de óleos, bocetos y dibujos eróticos que podrá contemplarse hasta el próximo 23 de octubre. Goenaga se ha basado en unos grabados eróticos chinos para realizar los óleos, unos 40, que desde ayer salpican de posturas amatorias las paredes del nuevo emplazamiento de la antigua galería La Brocha (ahora también con nuevo nombre), enfrente justo del Museo Guggenheim.

'En la historia de la pintura, el erotismo ha sido un tema recurrente. Ya estaban en las primeras pinturas de las cuevas prehistóricas. Lo erótico es muy para pintores', afirmaba Juan Luis Goenaga horas antes de inaugurar su muestra en Bilbao en la nueva galería de Emilia Epelde y Mikel Mardaras, que han dado el salto desde la parte más degradada de la capital vizcaína donde estaba La Brocha. 'Hemos pasado del peor sitio de Bilbao al mejor de todos para una galería, enfrente mismo del Guggenheim. Eso lo puedes hacer cuando tienes el respaldo de artistas que creen en tu galería', indica Epelde.

Uno de esos artistas es Juan Luis Goenaga, quien ha creado cerca de 40 cuadros al óleo, de trazos fuertes y vigorosos, tan apasionados como la temática que encierran, de distintos tamaños. Postura-txinarrak la completan los bocetos del autor para los cuadros y varios dibujos sobre el mismo asunto. 'El óleo en sí mismo es erótico. Para mí lo es: el olor, los pinceles... Es algo muy táctil', comenta Goenaga. En esta ocasión, además, el artista ha necesitado echar mano de colores que no son habituales en él: anaranjados, rojos, dorados, fucsias, además de los tierra y grises que le caracterizan. 'El tema me ha llevado a esos tonos vivos'.

Los cuadros muestran todo tipo de posturas eróticas. 'He usado bastante los tamaños pequeños para poder jugar con más facilidad con las posturas', indica el pintor. 'El erotismo es un tema que ya he tratado con anterioridad, pero ésta es la primera vez que realizo una exposición entera sobre ello. La temática erótica te da una libertad grande a la hora de trabajar. También el jugar con dos figuras aporta mucha libertad a la hora de componer el cuadro, y jugar con el interior, el lugar donde esas figuras están', explica.

Goenaga lleva meses trabajando en la exposición. 'Los fondos de algunos de los cuadros los hice en la exposición que montaron Epelde y Mardaras en Uribitarte, en el suelo de aquel edificio', cuenta, refiriéndose a la muestra colectiva de 14 pintores vascos que La Brocha montó en un edificio industrial junto a la Ría de Bilbao (que ya ha sido demolido) entre marzo y abril de este año.

Los tamaños de los óleos expuestos oscilan entre 20 x 14 centímetros y 2 x 2 metros y sus precios, entre las 80.000 y el millón de pesetas. Los bocetos y los dibujos, que están en paredes y en una carpeta, desde 30.000.

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Epelde & Mardaras (Alameda de Mazarredo, 65 bis) abrió como tal 'la víspera del pasado san Fermín', como indica la componente femenina de este dúo de imaginativos y valerosos galeristas, con una colectiva de obra sobre papel de Goenaga, Zumeta y Fito Ramírez Escudero. Después del erotismo de Goenaga, llegará Juan Mieg el 26 de octubre. A mediados del año que viene, la galería tiene previsto publicar un catálogo con todas las exposiciones que haya realizado. Además, 2002 es un año lleno de proyectos para Epelde y Mardaras. Entre ellos, estar presentes en Arco y organizar una exposición de Zumeta en Nueva York en primavera.

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