_
_
_
_
Reportaje:

Una Mercè que mira a Nueva York

El filósofo José Antonio Marina, pregonero de las primeras fiestas de Barcelona del milenio

Blanca Cia

Las fiestas de la Mercè de este año son especiales. Son las primeras del milenio pero, sobre todo, comienzan bajo el signo de la conmoción que han provocado en todo el mundo los atentados de Estados Unidos. Es una sensación aún tan viva que el paso de una de las escuadrillas de aviones que participará en la Festa del Cel originó ayer caras de incredulidad y miedo en pleno barrio gótico. También el pregón de las fiestas, a cargo del filósofo José Antonio Marina, se refirió a lo sucedido en Estados Unidos: 'Vivimos un instante crucial, lleno de posibilidades y peligros', dijo Marina.

'Quiero comenzar este pregón de fiesta recordando la tragedia de otra gran ciudad, Nueva York. Más que pedir un minuto de silencio, prefiero usar la palabra para meditar lo que tan triste suceso nos dice: vivimos un instante crucial, lleno de posibilidades y peligros. A nosotros nos toca decidir el futuro'. El pregonero de las fiestas de Barcelona este año, el filósofo José Antonio Marina, hizo un discurso muy reflexivo sobre el nuevo escenario que se está dibujando a nivel planetario: 'En un mundo global, que se encuentra confuso, que ha perdido certezas, que siente miedo a disolverse, aparecen movimientos de contracción peligrosos. Es preciso no momificarse ni volatilizarse', dijo.

En esa tesitura, con el recuerdo todavía ardiente de las Torres Gemelas del World Trade Center y el atentado del Pentágono en Washington, Marina abundó en la idea de que las culturas no deben interpretarse como los detonantes de las confrontaciones en el mundo, sino como el instrumento que tiene que ayudar a recomponer la paz.

Marina destacó que en el nuevo mundo global 'de soberanías nacionales permeables' el papel de la ciudad tendrá un protagonismo renovado: 'La ciudad es el lugar donde la nación adquiere rostro humano, pierde sus sentimientos belicosos y fomenta sus sentimientos cordiales'.

El pregonero definió Barcelona como una ciudad de tradición creadora. Y se refirió a que, al igual que las personas, hay ciudades inteligentes y ciudades estúpidas. 'Barcelona pasa con buena nota el test de las ciudades inteligentes, cosa que no podría decir de otras ciudades españolas', afirmó, sin aclarar cuáles serían las ciudades en su opinión estúpidas. Por ciudad inteligente, Marina definió la que es capaz de renovarse constantemente, la que manifesta tradición creadora. Y enumeró las muestras de inteligencia: 'La reinvención temprana de la democracia de este Consell de Cent, la Renaixença, el impulso industrial, el Eixample, Gaudí, su eficacia en los Juegos, el proyecto del Fòrum de les Cultures'. Dicho esto, Marina incitó a los bareceloneses a la fiesta y a saber celebrarla: 'Una cosa es saber divertirse y otra saber celebrar. En este momento la diversión es un acontecimiento cotidiano. Vemos un promedio de tres horas de televisión para divertirnos', dijo. Mientras el filósofo pronunciaba el pregón ante un Saló de Cent abarrotado, en la calle, en la plaza de Sant Jaume, un grupo de jóvenes pacifistas gritaban 'No a la Guerra'.

El desconcierto que sembró la pasada de los aviones en vuelos de entrenamiento por el centro de la ciudad se acabó cuando los pilotos recibieron la orden de alejarse del casco urbano para evitar más sobresaltos. Tras el pregón, el alcalde de Barcelona, Joan Clos, dio por comenzadas las fiestas de la Mercè como manda la tradición, con el toque de inicio en forma de petardos. Despúes, la salida de los gigantes y sus danzas dieron la señal para empezar la fiesta en la calle, mientras desde distintos puntos de la ciudad una multitud de jóvenes emprendía la marcha hacia la plaza de Catalunya para asistir al concierto de Manu Chao.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO
La plaza de Catalunya estaba ya llena a rebosar una hora antes de que comenzara el concierto.
La plaza de Catalunya estaba ya llena a rebosar una hora antes de que comenzara el concierto.VICENS GIMÉNEZ

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Blanca Cia
Redactora de la edición de EL PAÍS de Cataluña, en la que ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en diferentes secciones, entre ellas información judicial, local, cultural y política. Licenciada en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_