Un dirigente de EA dice tener indicios de la vulneración de derechos a varios detenidos

El secretario de Organización de la ejecutiva de Eusko Alkartasuna, Rafael Larreina, aseguró ayer tener 'indicios serios' de que se han dado situaciones en las que se han vulnerado los derechos humanos durante las recientes detenciones de la Guardia Civil, en el marco de la operación que ha supuesto la deserticulación del comando Barcelona de ETA y la posterior detención de varios grupos de colaboradores legales que la banda terrorista estaba organizando en Vitoria.

Larreina presentó ayer las líneas de actuación de su partido para el próximo curso y anunció que uno de los mensajes en los que van a insistir será en la exigencia del respeto al derecho a la vida y a los derechos humanos 'en todos los casos y a todas las personas'. Según su portavoz parlamentario, EA va a ser muy exigente en esta reivindicación porque tiene la 'convicción moral' de que se han producido 'violaciones graves' de los derechos humanos en personas acusadas de delitos de terrorismo.

El dirigente nacionalista hacía alusión a las recientes denuncias públicas realizadas por algunos de los detenidos en la citada operación. Unai Romano, en concreto, fue ingresado en un hospital con golpes en la cabeza y autolesiones en las muñecas. El juez ordenó, sin embargo, su ingreso en la cárcel de Soto del Real (Madrid), incomunicado hasta que preste su declaración.

'En materia de derechos humanos no caben excepciones' precisó Larreina, 'y al decir esto no damos alas a quienes predican la violencia ni defendemos la estrategia de quienes la practican, porque nuestra posición es la de defender la denuncia de todas las violaciones de los derechos'.

Según Larreina, desde EA estaban intentado obtener 'pruebas concretas' de que en esta ocasión se han vulnerado los derechos humanos y, en caso de que se consigan, este partido se personará como acusación particular.