Paulina Rubio, con Café Quijano, y Víctor Manuel y Ana Belén intentan abarrotar Las Ventas

Desde la disolución de Mano Negra, Manu Chao no se había presentado oficialmente en Madrid. En su línea, había ofrecido varias actuaciones clandestinas, pero es esta noche en Fuenlabrada cuando pone de largo sus dos obras en solitario, Clandestino y Próxima estación: Esperanza. El mano a mano de la mexicana Paulina Rubio con los leoneses Café Quijano y el recital de Víctor Manuel y Ana Belén se presentan como los otros dos actos multitudinarios de la semana. En Alcalá, el flamenco rinde homenaje a Manuel Soto, Sordera, patriarca de una gran dinastía y fallecido hace tres meses. En el foro, el veterano café La Fídula inicia un ciclo reivindicativo de la noche como espacio para todas las manifestaciones del arte y la cultura.

- Las grandes audiencias. Es impresionante lo poco que han durado en taquilla las 7.000 entradas del recital de hoy de Manu Chao. El artista, fundador de Mano Negra y pintoresco portavoz de los desfavorecidos de la Tierra, no actuaba en Madrid de manera oficial desde que gira en solitario. Los éxitos de sus dos discos -su reciente Me gustas tú es uno de los himnos alternativos del verano- y su prestigio como luchador por las causas perdidas han generado ese hambre por verle cantar en vivo.

Un camino parecido llevan las localidades con las que ver en Las Ventas a Paulina Rubio con Café Quijano, y un día después, a la eterna pareja Víctor Manuel y Ana Belén. La mexicana es la intérprete de dos de las canciones más escuchadas en los últimos meses: Y yo sigo aquí y Vive el verano. Los de León siguen en línea ascendente, ratificada con el éxito de La taberna de Buda, su último disco.

Con sendos trabajos recientes en el mercado, Víctor Manuel y Ana Belén han vuelto a unirse en el escenario para la gira denominada Dos en la carretera. En el espectáculo se alternan las canciones nuevas de El hijo del ferroviario (Víctor) y Peces de ciudad (Ana) con su repertorio en común de siempre, con el añadido del hijo de ambos, David San José, que aporta sus coros y su sabiduría musical.

- La noche como foro de culturas. La Fídula inicia un plan para que todo el mundo se entere de que en la noche se pueden hacer muchas cosas y que la diversión no está reñida con la cultura. El Festival Internacional Música en la Noche acoge poesía, ópera, teatro, jazz, blues, canción francesa o flamenco, todo para concienciar y luchar contra muchos lugares comunes y para reivindicar la importancia de los bares y locales que trabajan de noche.

Amparanoia sabe mucho de eso. La noche la llevó del blues al bolero, del rhythm and blues y el rock al son a la guaracha y a la ranchera. Su experiencia mezcladora gozosa la tiene en Suristán una noche que estaba prevista otra actuación. Por allí pasará también el ska de los vascos Doktor Deslaï y de los británicos Intensifield!, o la mística india de Átmârâmâ Dâsa.

- Dos grandes damas. Desde Venezuela, Neiffe Peña, y desde Colombia, Petrona Martínez, muestran dos maneras diferentes de concebir la música del Caribe. Las dos parten de la tradición de sus respectivos países para transformarla a sus antojos. Petrona es hija y nieta de bullangueras, por lo que tiene el ritmo en la sangre; Neiffe también domina la cultura que procede de Europa; por ello no es difícil que interprete cantos sefardíes, griegos o hebreos sin perder su identidad venezolana.

- 'Sordera' y los demás. Los hermanos Enrique, Vicente y José Soto se unen para recordar a su padre, Manuel Soto Monje, Sordera, fallecido el pasado 24 de junio. Será un homenaje con otras figuras del flamenco; entre ellas, su sobrino José Mercé, además de la cantaora Estrella Morente, el bailaor Antonio Canales o las guitarras de Enrique de Melchor o Moraíto. Los Ketama, que fundó José Soto, Sorderita, también se unen, entre otros artistas, al homenaje.

Brasil suena en café Berlín con Leo Minax y el contrabajista Baldo Martínez pasa la semana en el Central. Brian Setzer, antiguo miembro del grupo de rockabilly Stray Cats, ofrece su trepidante swing en La Riviera, mientras que Macumba vuelve a transformarse en el club londinense Ministre of Sound, esta vez con los pinchadiscos Ismael Rivas y Lottie.

El heavy, patrio y foráneo, celebra una fiesta de dos noches en Arena con los grupos de un nuevo sello: Days End. Faemino y Cansado ponen humor, igual que Riki López, que le añade música. Y Alejandro Filio muestra que en México también hay cantautores inspirados en la Nueva Trova cubana.