Denilson desquicia al Espanyol y forja el triunfo del Betis

La imperiosa necesidad personal que tiene Denilson de reafirmar su fútbol llevó ayer al Betis a rozar la perfección en su debut en casa. Las ganas que tiene el brasileño por ratificar su valía, unidas a las ansias de triunfar en Primera que albergan canteranos como Joaquín o Varela sirvieron para que el Betis diera un magnífico espectáculo, algo que sin duda agradeció su afición, poco habituada a tan tempranas alegrías.

Prueba de ello fueron las 14 tentativas que en la primera mitad tuvo el Betis ante la puerta de Mora, dos de las cuales cristalizaron antes de la media hora de partido sin que el Espanyol siquiera parpadeara. Orden, ritmo y presión. Esto fue lo que conjugó el equipo de Juande Ramos para anular casi por completo al conjunto catalán, en el que sólo Tamudo, secundado por Velamazán, trató de devolver entidad a su equipo, difuminado en el primer tiempo por las diabluras y la calidad del brasileño y de Joaquín en sus respectivas bandas.

Y en busca de un tercer gol que se resistió, y no por falta de ocasiones, discurrió la segunda parte, en la que Amato sustituyó al todavía inadaptado Joao Tomas y Casas dejó sitio a Capi para que el Betis certificase su debut en casa con una goleada que, si no se dio ayer, seguro que de seguir así llegará.