La oposición acusa al Gobierno de utilizar a Cardenal para defender a Josep Piqué

Las peticiones de la oposición parlamentaria para que el fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, ofrezca explicaciones sobre algunas de sus actuaciones se acumulan en el Congreso de los Diputados. Ayer hubo una nueva del PSOE, Izquierda Unida e Iniciativa per Catalunya tras conocer el apartamiento del fiscal Bartolomé Vargas del caso Ercros, partidario de que el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqué, declare como el resto de los directivos de la empresa.

'El Gobierno ha dado instrucciones a Cardenal para proteger a Piqué, demostrando que el ministro no es un ciudadano como los demás y a él no le llega la Justicia, además de tener al fiscal general como su abogado defensor', acusó el portavoz parlamentario del PSOE, Jesús Caldera. El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, pidió ayer la comparecencia de Cardenal y que inmediatamente después dimita.

'El fiscal general del Estado se ha convertido en el brazo armado del presidente del Gobierno, pero fracasará en su intento de enterrar el caso Piqué y éste acabará respondiendo ante la Justicia', dijo Llamazares. Los grupos de oposición han visto confirmados sus peores augurios sobre este caso, es decir, que el Gobierno apartara al fiscal Vargas para que no vuelva a plantearse una situación incómoda para el ministro de Exteriores cuando sólo quedan cuatro meses para que España ostente la presidencia de la UE, que mantendrá a Piqué durante seis meses en permanente actividad pública.

El PSOE, IU e Iniciativa per Catalunya coincidieron sin dudarlo en situar detrás de la decisión de Cardenal la mano del Gobierno. Ahora que empieza el curso parlamentario, la oposición de izquierda reanudará su intento de que el fiscal comparezca en el Congreso y pueda ser preguntado sobre las peripecias de la carrera fiscal en torno al caso Piqué.

Los socialistas, además de pedir esta comparecencia, han formulado una pregunta para que sea respondida en el pleno del Congreso por el ministro de Justicia, Ángel Acebes, a fin de que se sepa 'qué instrucciones ha dado al fiscal general' sobre este caso, señaló Caldera. El portavoz parlamentario de Justicia, Javier Barrero, confió en que esta vez la Mesa del Congreso autorice la comparecencia del fiscal ante 'este acto insólito en democracia, que pone de manifiesto cómo desde la fiscalía se promueve la impunidad del Gobierno'.

La petición que ha hecho el PSOE de comparecencia del fiscal no alude directamente a Vargas sino que ha elegido un argumento aparentemente neutro para tratar de salvar el obstáculo de la Mesa del Congreso, órgano encargado de dar trámite a la petición o rechazarla. Se pide la presencia de Cardenal para que informe 'sobre los criterios de las fiscalía general para asignar a los fiscales en las distintas secciones de las salas del Tribunal Supremo'.

Otra de las críticas que la oposición vierte a la luz de este hecho tiene que ver con la 'credibilidad de la justicia' para los ciudadanos. 'Hechos como este aumentan la desconfianza de los ciudadanos e inciden negativamente en la credibilidad del Gobierno para afrontar otros casos de investigación como el de Gescartera'. Caldera añadió que 'el Gobierno demuestra una y otra vez la forma de entender el poder, porque si han dado estas órdenes para proteger a Piqué, harán lo mismo en Gescartera'. El portavoz socialista se preguntó por la escasa confianza que puede despertar este Gobierno cuando es capaz de 'impedir que uno de sus ministros cumpla con sus obligaciones'.

Además de la política, los socialistas no van a perder de vista el procedimiento utilizado por la fiscalía para destinar a Vargas a otra sección del Tribunal Supremo. Barrero apuntó que la medida puede tener 'un barniz prevaricador'. El portavoz parlamentario de IU, Felipe Alcaraz, señaló que incluso en el supuesto de que la medida fuera legal, para su grupo constituye 'un auténtico escándalo'.