Los inmigrantes y las administraciones llegan a un principio de acuerdo

Tras muchas vueltas, las administraciones catalanas aceptaron la contraoferta que planteaban los inmigrantes y la plataforma de apoyo. A la oferta de alojamiento temporal, que ya estaba sobre la mesa y que garantiza el anonimato y la asistencia jurídica, se han sumado ahora dos nuevas demandas de los inmigrantes: que la acogida dure tanto como el expediente en tramitarse y que esta medida alcance a los inmigrantes detenidos en el Centro de Internamiento de La Verneda, siempre y cuando el juez lo autorice. Quedó fuera de la negociación la petición de regularización, porque ni la Generalitat ni el Ayuntamiento tienen competencias en ese terreno.

La oferta de alojamiento se canalizará a través del Servicio de Atención e Información al Extranjero y Refugiado (SAIER) si los inmigrantes aceptan finalmente la oferta. La atención será individualizada e incluirá la formación ocupacional. De esta manera finalizará la primera fase de una polémica negociación que comenzó hace 20 días tras la expulsión de un centenar y medio de subsaharianos de la plaza de Catalunya y la posterior incorporación al grupo de un centenar de magrebíes sin papeles que también pedían ser regularizados.

La segunda fase de la negociación consistirá en 'exigir al Gobierno central la legalización del máximo número de sin papeles, ya que en España se trata a la inmigración como un problema policial', expresó Simón Rosado, representante de la plataforma de apoyo y miembro de Comisiones Obreras.

La Generalitat y el Ayuntamiento han exigido al Gobierno 'la construcción de una red de acogida de inmigrantes para España y para Cataluña, tal como prevé el reglamento de la Ley de Extranjería'. Las administraciones se han mostrado satisfechas por el principio de acuerdo alcanzado en este conflicto, que ha obligado a unas 250 personas a peregrinar durante dos semanas por las calles de Barcelona.