Simpatizantes de ETA atacan el caserío de una 'ertzaina' en Idiazabal

El ataque contra la vivienda de la agente, que sufrió otra agresión similar en enero de 1998, se produjo a las 3.40. La ertzaina dormía en ese momento en el caserío y se despertó al oír las detonaciones. Pero ni ella ni el edificio sufrieron ningún daño, ya que los cohetes no alcanzaron su objetivo. Los radicales, que quemaron después una caseta de Telefónica en la misma localidad, habían situado a un centenar de metros de la casa una lanzadera compuesta por tres tubos de PVC. Al parecer, los artefactos, impregnados en gasolina, explotaron en las propias lanzaderas, pues sólo se han encontrado restos sobre la hierba. Sin embargo, la Ertzaintza no descarta que alguno de los cohetes saliera de los tubos.

Con esta agresión fallida suman ya 25 los actos de kale borroka cometidos este año contra agentes de la Ertzaintza o sus bienes (13 en Vizcaya, ocho en Guipúzcoa y cuatro en Álava). Además, dos miembros del cuerpo han sido asesinados por ETA.Los violentos parecen decididos a mantener su acoso a la policía autónoma, según se desprende de la reivindicación realizada por un 'comunicante anónimo' al diario Gara sobre el ataque cometido el domingo contra dos ertzainas en Portugalete (Vizcaya). Anuncia que continuarán las acciones contra quienes 'niegan la existencia' del pueblo vasco y los que 'se regocijan con el dinero español que reciben para actuar contra la izquierda abertzale'.

Estado de los heridos

Uno de los dos agentes abrasados en esa emboscada, M.R.L., evoluciona favorablemente y su estado ya es menos grave, según el parte facilitado ayer por el hospital de Cruces. Su compañero, C.G.D., que el jueves fue operado para recibir injertos de piel en ambos brazos y piernas, permanece en estado muy grave en la Unidad de Grandes Quemados de dicho hospital.

Mientras tanto, la polémica sobre la eficacia de la Ertzaintza enfrentó ayer al portavoz de la ejecutiva del PNV, Joseba Egibar, con el sindicato independiente Erne, mayoritario en el cuerpo. 24 horas después de que la central sindical presentase su plan contra la kale borroka con duras críticas a la Consejería de Interior. Egibar acusó a Erne de completar la estrategia del PP 'politizando la Ertzaintza'y aseguró que el 'presunto plan' es una consecuencia 'de las relaciones que mantienen PP, PSE y Erne'. 'En los últimos dos años y medio', dijo, 'Erne le ha hecho el trabajo al PP y el PP le ha hecho el trabajo sucio a Erne'.

Egibar calificó de 'mentiras' las acusaciones del sindicato sobre la falta de eficacia de la Ertzaintza en su labor contra el terrorismo callejero. Aprovechó para recordar que el pasado sábado fue atacado el cuartel de la Guardia Civil de Estella (Navarra) sin que se registrase ninguna detención. Y concluyó: 'Si algunos pudieran hacer desaparecer a la Ertzaintza por decreto, lo harían'.

La respuesta de Erne a las declaraciones de Egibar fue inmediata. Su secretario general, Iñaki Castro, calificó su análisis de 'absolutamente impresentable'. 'Nos parece que no tienen argumentos y hacen lo fácil, politizar el asunto'. Batasuna y las Gestoras Pro Amnistía también arremetieron ayer contra el sindicato.