La familia del hombre tiroteado en Moratalaz dice que habrá 'venganza'

Una venganza se cierne sobre una familia conocida por Los Arineos. Los allegados de Jesús Navarro Fernández, el hombre de 48 años de etnia gitana que fue tiroteado y acuchillado la tarde del sábado en Moratalaz, anunciaron ayer que están buscando a los autores del homicidio por toda España. Según explicaron sus familiares, el fallecido había acudido a ver a un vecino y le había pedido que un hijo suyo dejara de robar en las obras que Navarro vigilaba. La víctima será enterrada hoy en el cementerio Sur.

La muerte de Navarro Fernández se produjo a las seis de la tarde del sábado, a la altura del número 25 de la calle de Molina de Segura (Moratalaz), tres números más abajo de donde vivía la víctima. Tras mantener una discusión con los vecinos del primer piso, abandonó la casa. Un grupo de tres o cuatro personas le esperaban en el portal y, nada más verle, abrieron fuego contra él. La policía encontró cuatro casquillos en el interior del portal y en las escaleras de acceso a la finca. La víctima presentaba dos orificios de bala que le entraban por el tórax y por la espalda. Además, tenía una herida inciso-contusa originada por arma blanca en la región lumbar. Los autores de los disparos huyeron en un monovolumen de la marca Renault.

Unas dos horas después, la vivienda del primer piso del número 3 del pasaje de Anchuelo (a 10 metros del lugar del homicidio) quedaba completamente arrasada por un incendio. Ese piso pertenece al hijo del hombre que Navarro Fernández fue a ver, según informaron los vecinos de la zona.

Búsqueda

Ayer por la mañana se juntó medio centenar de familiares en el Instituto Anatómico Forense. Los mayores no dejaban de decir que 'muy pronto va a haber venganza' y que 'caerán' los miembros del clan de los Arineos que mataron a Navarro Fernández. Aseguraron que los están buscando por toda España y que 'antes o después los encontraremos'.

'Él fue a ver al del primer piso para decirle que su hijo dejara de robar material en las obras que vigilaba Jesús. Como el chaval es drogadicto, tiene que pagarse la droga con lo que sea', explicaron familiares cercanos a la víctima, 'entonces lo mataron sin darle tiempo a defenderse'.

El cadáver fue trasladado a mediodía a la sala 24 del tanatorio sur, en la carretera de Toledo, y está previsto que sea enterrado a las 11.30 en el cementerio Sur, según informaron fuentes de la Empresa Mixta de Servicios Funerarios.

La policía continúa las investigaciones. Ayer por la tarde no había detenido a ninguna persona relacionada con este homicidio, según informó un portavoz de la Jefatura Superior de Policía. El Juzgado número 6 se encarga de la instrucción.

La víctima vivía en Moratalaz desde hacía cuatro años. Tenía siete hijos (cinco niñas y dos varones) con edades entre los 10 y los 26 años. El fallecido contaba con varios antecedentes. El último que constaba en su ficha policial era por allanamiento de morada, según fuentes policiales.