Los gastos duplican los ingresos
El cierre parcial de la contabilidad de la Generalitat Valenciana a mitad del ejercicio presupuestario pone de manifiesto que gastar es mucho más fácil que cobrar. En conjunto, las consejerías han pagado el doble de lo que han ingresado.
Fuentes oficiales consideran normal la situación y recuerdan que la inmensa mayoría de las transferencias del Estado o de la Unión Europea se reciben en los últimos meses del año.
'En cualquier empresa privada los pagos se ejecutan al instante y los cobros se reciben a 90 días', comenta un alto cargo de la Generalitat. Pero la diferencia entre pagos e ingresos en las arcas públicas, que ronda los 300.000 millones, genera severas tensiones de tesorería y gastos financieros derivados de las deudas a corto plazo.
La caja de la Generalitat registraba unas existencias negativas de 286.252 millones de pesetas cumplido el primer semestre de 2001, un agujero que sólo se cubre con el pago de intereses millonarios.
Las consejería de Sanidad y Educación, además, han gastado en seis meses por encima de la mitad de la totalidad de su presupuesto anual. La falta de recursos para dotar los servicios públicos esenciales revela
El volumen de pagos realizados contrasta con las crecientes quejas de varios proveedores de la Generalitat que arrastran facturas desde hace más de medio año.
Fuentes oficiales explican que la nómina de los empleados públicos, que supone aproximadamente un 40% del presupuesto, se paga sin retrasos. También se paga en punto la factura de Farmacia, una partida que supone en torno al 10% del presupuesto total. Y sugieren que la solvencia de las distintas áreas está directamente ligada a la eficacia de sus procedimientos de gestión administrativa.
Sin embargo, Vicente Rambla, consejero de Hacienda, se apresuró a dictar una orden a principios del presente mes de junio que congela cualquier gasto a partir del 3 de septiembre.
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