La ley de la jungla
En el asesinato de Phoolan Devi hay algo más que un toque de ironía. Una mujer que sobrevivió a los peligros del Valle de Chambal, donde el asesinato forma parte de la rutina diaria, ha sido asesinada en la zona más protegida del país, en el mismísimo corazón de la capital, y a la sombra del Parlamento. Parece ser que al final (...) no pudo escapar a la ley de la jungla, según la cual matar y ser matado están inexorablemente relacionados. La violencia que tan decisivamente había marcado su corta vida ha cerrado finalmente el ciclo.
Es sabido que es difícil desenmarañar la enredada madeja de su vida. Es difícil separar la mujer de la criminal y casi imposible diferenciar los hechos reales de su vida de aquellos que se nos han presentado en la ficción, (...) de los protagonizados por esa 'reina de los bandidos' en la que para muchos se había metamorfoseado Phoolan Devi. Las versiones cinematográficas de su vida nunca podrán contar la verdadera historia. Lo cierto es que Phoolan Devi fue al mismo tiempo violadora y violada, asesina despiadada y víctima lastimera. (...)
Impregnar de romanticismo una vida como la suya sería reírse de las vidas que fueron destruidas por ella. Pero también debemos tener en cuenta el valor y la inteligencia que esta poco instruida mujer empleó en librarse de su oscuro pasado, reinventarse como política, desenvolverse en la jungla urbana e incluso hacer oír bien alto su voz en el Parlamento a favor de los desvalidos. Lo cierto es que a pesar de todo el daño que pudo haber cometido a lo largo de su vida, no merecía morir de esa manera.
Delhi, 26 de julio
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