Cáritas planea crear el Defensor del Débil para atender a los marginados
Las cerca de 100.000 personas que viven en Madrid en estado de pobreza severa contarán a partir del próximo año con un Defensor del Débil, una institución ideada por Cáritas para 'hacer valer la voz de los que no tienen voz'. El director de esa organización, Julio Beamonte, asegura que la creación de esta figura 'dará la voz a un colectivo tan amplio como son los marginados, que, según la Constitución, tienen los mismos derechos que el resto de ciudadanos'.
'Existe el Defensor del Pueblo y el Defensor del Menor, pero es necesaria también la creación de una figura colegiada y apoyada por Cáritas que se haga eco de los problemas de este colectivo', explica Beamonte. La organización que dirige tiene previsto también en 2002 la creación de una Casa de Atención para los sin techo que funcione las 24 horas del día. Este hogar de acogida, que comenzará a construirse a finales de verano, servirá de apoyo al Centro de Atención Integral a Personas Sin Hogar (CEDIA), que también funciona durante todo el día y que, a través de sus 54 voluntarios, ofrece asistencia básica y servicios de atención grupal y ocupacional a las personas más desfavorecidas de la región.
Para las personas que tratan de superar una drogadicción, Cáritas cuenta con un centro de distribución de metadona, que actualmente atiende a 150 individuos. A ello se une una casa de acogida para enfermos de sida.Según la Memoria del año pasado, Cáritas contó en 2000 con más de 8.000 voluntarios que atendieron a cerca de 40.000 personas en centros de acogida a través de 464 puntos de acción social. De ellos, más de 1.100 realizaron cursos de formación impartidos por la propia institución. Algunos de los factores que propician el aumento de la sociedad marginal son el paro, la drogadicción y el fenómeno de la inmigración. Por ello, esa organización católica cuenta con 520 proyectos, que, a través de la Red Solidaria en Madrid, atienden a personas sin hogar, parados, enfermos de sida, personas mayores, mujeres y niños.
Respecto al fenómeno del paro en la región, el director de Cáritas Madrid señaló que los datos 'han mejorado sustancialmente'. 'Pero aunque llegásemos a una situación de pleno empleo, seguiría existiendo un colectivo incapaz de acceder a un puesto de trabajo', añadió. Cáritas pone a disposición de ese colectivo una escuela de formación profesional, talleres de formación sociolaboral, un taller prelaboral, otro de producción para mujeres y dos empresas de inserción.
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