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El túnel de Santa María de la Cabeza costará 619 millones más

La sustitución del paso elevado de la calle de Santa María de la Cabeza por un túnel costará 619 millones más de lo previsto (3.101 millones). La comisión informativa de Urbanismo dio luz verde ayer a una modificación del proyecto para prolongar el túnel 140 metros a petición de la junta de distrito de Arganzuela. La medida pretende evitar que la boca de salida del subterráneo coincida con un paso de peatones donde ya se han producido varios atropellos mortales. La gran velocidad con que suelen salir a la superficie los coches que circulan por los túneles aumentará previsiblemene la peligrosidad de esa zona de cruce.

Tras esa modificación, el subterráneo tendrá una longitud de 1.050 metros y costará 3.720 millones de pesetas, 619 millones más de lo previsto en el proyecto inicial. La salida del túnel, prevista a la altura de la calle de Peñuelas, se situará pasado el paseo de la Esperanza e inmediatamente antes del puente de Praga. Con esa prolongación, los coches podrán conectar directamente con el trébol de enlaces de la M-30, situado en el puente de Praga.

Circulación en sentido salida

El túnel, que tendrá circulación sólo en sentido de salida, tendrá dos carriles de tres metros y medio de ancho cada uno. La boca de entrada se mantiene en el punto inicialmente previsto en la calle de Santa María de la Cabeza: a 100 metros de la glorieta de Carlos V (Atocha) y junto a las calles Marqués de Valdivia y de Murcia. Las obras, con una duración prevista de 17 meses, comenzaron el pasado 4 de junio y han supuesto desvíos de tráfico que afectan directamente a los 50.000 vehículos que usaban cada día el paso elevado. El desmontaje del paso elevado, ya muy avanzado, durará hasta mediados del próximo mes de septiembre. El tráfico que discurría por el ramal situado sobre la calle de Embajadores se mantendrá en superficie.

Tanto el PSOE como IU apoyaron en el pleno municipal que se retirara el paso elevado, pero reiteraron ayer su rechazo a que esa infraestructura se sustituya por un túnel. A pesar de ello, Justo Calcerrada, portavoz de IU, justificó la modificación del proyecto para alargar el subterráneo porque con ello se mejorará la seguridad vial. 'Vamos a arreglar una chapuza, pero nos va a costar 700 millones. Para ser coherentes hemos dicho que no al túnel, pero estamos a favor de la modificación porque no podemos hacer una salida en un punto donde la gente se juega la vida', afirmó ayer Calcerrada.

La portavoz del grupo socialista, Marta Rodríguez-Tarduchy, se mostró más crítica y denunció que esa modificación es un 'fraude de ley'. 'Estaba prevista en las prescripciones de obligado cumplimiento. La empresa tiene la obligación de hacerlo según la adjudicación definitiva y no tendríamos que pagar 700 millones por ello', afirmó Rodríguez-Tarduchy.

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