Los conductores de Comes suspenden la huelga para negociar con la dirección

Transportes Generales Comes, principal empresa de autobuses de Cádiz, volverá a la normalidad a las cinco de la madrugada de hoy. Los 160 conductores de la compañía suspendieron ayer la huelga que tenían convocada hasta el martes para facilitar las negociaciones que mantendrán el lunes con la dirección de la empresa. Más de 15.000 personas sufrieron ayer un paro de 24 horas, el séptimo consecutivo en las últimas dos semanas.

La mediación del delegado provincial del Obras Públicas y Transportes en Cádiz, José de Mier, ha resultado decisiva para que las partes se sienten a negociar este lunes, después de que durante las dos últimas semanas se hayan intercambiado acusaciones y descalificaciones mutuas.

Los trabajadores decidieron ayer suspender la huelga que ha dejado sin servicio a muchas poblaciones gaditanas y que han sufrido especialmente aquellos municipios, como Barbate, Conil o Vejer de la Frontera, en la comarca de la Janda, donde no hay un servicio alternativo de transporte como los trenes de Renfe.

El comité de empresa adoptó esta decisión como 'gesto de buena voluntad' para resolver este conflicto, según explicó ayer un portavoz de los trabajadores.

José de Mier explicó ayer por la tarde que las negociaciones comenzarán el lunes a las 10 horas. En esta primera reunión, las partes han aceptado abordar todas las denuncias existentes.

Los trabajadores acusan a la dirección de incumplir los horarios de conducción, los turnos de descanso y aquellos cuestiones relacionadas con la seguridad contempladas en el convenio colectivo y en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.

Por su parte, el director de Comes, José Luis Pérez Pita, ha acusado a la plantilla de conductores de secundar una huelga 'ilegal y abusiva', de no respetar los servicios mínimos, y de provocar incidentes, como el incendio del autobús más caro de la flotilla de la empresa -valorado en 32 millones de pesetas- y de causar también daños importantes como la rotura de cristales y lunas en algunos autocares mientras transportaban pasajeros.

Pese a estas diferencias, el delegado de Obras Públicas y Transportes se mostró confiado en que en esta ronda de negociaciones se alcanzará un acuerdo. 'Estoy convencido de que vamos a arreglar el transporte de la provincia de Cádiz. No es un farol, porque la intención de las dos partes es resolver para muchos años unos problemas que no son nuevos y que han heredado de gestiones anteriores', señaló ayer José De Mier.

Ni el comité de empresa ni la dirección quisieron ayer pronunciarse oficialmente sobre la suspensión de esta huelga hasta que no comiencen las negociaciones el próximo lunes y se sepa qué rumbo toman.