La guerrilla colombiana, acusada de violar los derechos humanos
Human Rights Watch exige el fin de los abusos
La guerrilla colombiana de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) ha sido acusada de graves violaciones de los derechos humanos por parte de la organización Human Rights Watch (HRW), que se ha dirigido al máximo dirigente guerrillero, Manuel Marulanda, Tirofijo, para exigirle que ponga fin a los abusos que se cometen en la zona desmilitarizada por el Gobierno de Bogotá y bajo el control total de la guerrilla.
En una misiva de 20 folios, HRW describe prácticas de la guerrilla tales como asesinato y secuestro de civiles, toma de rehenes, uso de niños como soldados, celebración de seudojuicios, tratamiento cruel e inhumano de combatientes capturados y desplazamiento forzado de civiles. Según la organización internacional, la guerrilla colombiana también utiliza regularmente armas prohibidas, tales como cilindros de gas, y ataca a trabajadores e instalaciones médicas violando flagrantemente el derecho internacional humanitario.
'Le insto a que dicte instrucciones claras y estrictas a todas las fuerzas de las FARC para que cese inmediatamente toda actividad que viole el derecho internacional humanitario. Del mismo modo también le insto a que adopte medidas efectivas que permitan supervisar el cumplimiento de una política de respeto al derecho internacional humanitario para prevenir que se sigan cometiendo graves abusos', exige en la misiva el director ejecutivo para América de la organización, José Miguel Vivanco, al comandante guerrillero.
'Las FARC tienen un horrible historial de abusos', señaló Vivanco. 'El comandante Marulanda, como jefe máximo de las FARC-EP, es responsable de tomar las medidas necesarias para adoptar y aplicar los estándares legales internacionales. Por esta razón nos dirigimos a él directamente'.
La organización defensora de los derechos humanos destaca que los guerrilleros atacan centros sanitarios y vehículos como ambulancias, aunque sus distintivos sean claramente visibles. 'El derecho de la guerra prohíbe claramente los ataques a personal médico o a los heridos bajo su cuidado, incluidos combatientes, o a instalaciones sanitarias, incluidas las ambulancias y los hospitales. De hecho, la prohibición se extiende no sólo a dichas instalaciones oficiales, sino a toda estructura o vehículo con el distintivo de la cruz roja y que esté siendo utilizado para transportar o atender a los heridos', explica la carta dirigida a Marulanda.
Niños soldado
Entre las prácticas más denunciadas figura el reclutamiento de niños para formar parte de las unidades operativas de las FARC. Según investigaciones llevadas a cabo por HRW, se han dado casos de numerosas adolescentes reclutadas y coaccionadas por sus comandantes a mantener relaciones sexuales con éstos.
Los familiares que las buscan obtienen escasa colaboración por parte de las autoridades guerrilleras, y abandonar la guerrilla es muy complicado; a menudo la deserción se paga con la muerte. 'La guerrilla ofrece aventura, pero, cuando se acaba la novedad, no pueden regresar a casa', señala un funcionario de la Defensoría del Pueblo de Colombia citado por la organización.
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