_
_
_
_

Parla, el 'mejor' ejemplo

La localidad de Parla es el paradigma del caos que reina en los juzgados regionales. Tiene cuatro juzgados para una población de casi 100.000 habitantes. Cada uno tocó el año pasado a 3.198 asuntos. Sus instalaciones son totalmente 'inadecuadas e insuficientes', según el informe del Tribunal Superior. El propio servicio de inspección del Consejo las ha calificado de 'caóticas' en un informe fechado el 21 de septiembre de 1999, en el que propuso construir una nueva sede. Los juzgados 1, 2 y 3 se hallan en un sótano, sin luz natural y en un espacio inicialmente previsto para sólo dos juzgados. 'Los cuatro juzgados actuales sólo disponen de una sala de vistas, donde han de celebrarse las comparecencias civiles, los juicios de faltas y las bodas'.

La biblioteca es 'un reducido espacio sin ventilación, más bien un almacén de libros y de piezas de convicción y archivo'. 'El juzgado decano', se añade en el informe, 'está en un inmueble, y los funcionarios, en otro; y de los cinco funcionarios del decanato, sólo tres tienen mesa. Sólo hay un aseo para los tres juzgados que hay en una de las sedes, que tienen que compartir con los usuarios. Los medios materiales también son escasos, insuficientes e inadecuados; no hay informatización'.

Recuerda el informe que en este partido judicial hay 'muchos usuarios inmigrantes y con precariedad de medios', lo que obliga a hacer una justicia 'más asistencial y eficaz'. Se necesita un edificio judicial.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_