Detenido en Madrid uno de los ultras italianos más buscados

Belsito, nacido en Roma el 27 de julio de 1962, fue capturado por agentes de la Unidad Central de Información Exterior, de la Comisaría General de Información española, en colaboración con la Dirección Central de la Policía de Prevención de Italia, que lo buscaba desde hace 21 años, según informó el Ministerio del Interior. El terrorista, que portaba documentación falsa, mantuvo un duro enfrentamiento con la policía pero finalmente fue reducido 'sin que hubiera disparos ni heridos graves' en la refriega. La policía esperaba al cierre de esta edición una orden para registrar el chalé que el detenido tenía en Madrid.

Belsito, buscado en su país desde un secuestro perpetrado en septiembre de 1980, participó siendo aún menor de edad en el homicidio del fiscal Antonio Amato, lo que le supuso una condena de siete años por el Tribunal de Menores de Roma, según informó ayer el Ministerio del Interior italiano, que envió a EL PAÍS el historial de sus crímenes.

Los tribunales de Roma lo condenaron a cadena perpetua por el asesinato, el 6 de enero de 1981, del extremista de derechas Luca Perucci, 'un elemento de segundo plano de la Tercera Posición [organización de extrema derecha a la que también pertenece Belsito], considerado colaborador de la policía'. Su siguiente víctima fue el agente de la Patrulla Móvil de Roma Ciro Capobianco, al que mató a tiros el 5 de diciembre de 1981 en un enfrentamiento entre tres policías y otros tantos terroristas, uno de los cuales, Alessandro Alibrandi, quien también falleció.

Al día siguiente, Belsito y el terrorista Ciro Lai 'mataron a sangre fría al mariscal del arma de Carabineros Roberto Radici', que había montado un control de carreteras, e hirieron gravemente a un transeúnte y a otro agente. 'Incluso estando herido de bala en un muslo, Belsito consiguió secuestrar sucesivamente dos coches y huir', asegura el ministerio italiano. Estas acciones le acarrearon otra cadena perpetua por 'constitución de banda armada y participación en atentado terrorista'. Y la tercera pena a perpetuidad le cayó por asesinar en Florencia a otro compañero de filas, Mauro Menucci, quien también estaba colaborando con la policía italiana.

La pista de Belsito se difuminó durante años hasta que fue recobrada en Francia, donde el 21 de enero de 1988 perpetró un atraco del que logró escapar a tiros tras herir gravemente a un policía. Resultado: cuarta condena a perpetuidad 'por tentativa de asesinato de dos policías'.

Belsito tiene pendientes dos órdenes internacionales de detención para extradición y es uno de los terroristas de extrema derecha más buscados de Europa. Además, tiene antecedentes por numerosos atracos a mano armada en Italia y Francia con los que financiaba los NAR. Durante 21 años ha evitado su detención a pesar de que su presencia ha sido detectada por los servicios de inteligencia en varios países de Suramérica, Francia, Reino Unido, Holanda, Líbano y Croacia.

Las autoridades italianas subrayaron ayer que el detenido era 'un personaje temido por los propios ambientes subversivos de derecha' y 'por quienes participaban con él en sus crímenes, preocupados por la fiereza de su modus operandi'. Los ministerios del Interior español e italiano subrayaron ayer que la detención es fruto de las relaciones policiales entre ambos países, impulsadas por Juan Cotino, director general de la Policía, y su homólogo italiano, el prefecto Gianni di Gennaro, que incluso han creado 'grupos de investigación conjuntos'.